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Precintados tres locales de ocio de la ría por carecer de una licencia municipal

El dueño de los negocios asegura que cumple todas las exigencias y ve una "mano negra" que frena los trámites

Los locales de ocio precintados. RICARDO SOLÍS

Tres locales de ocio y hostelería ubicados en la avenida Conde de Guadalhorce -un bar musical, una bocatería y la discoteca que el pasado sábado abrió al público con una novedosa oferta que impide el consumo de alcohol a los menores de edad- están precintados desde la tarde del lunes por carecer de licencia de actividad, según precisó el concejal responsable del área, el socialista Manuel Campa. El edil comentó que la decisión está motivada, "en buena medida", por una cuestión de responsabilidad derivada de la alta concurrencia de público que tuvo el sábado la "disco-light", que inició su actividad con gran éxito.

Campa dio a entender que el equipo de gobierno municipal quiere las máximas garantías de seguridad en el funcionamiento de un local que se llena de público adolescente y juvenil. Los otros dos establecimientos afectados por la decisión son anejos a la discoteca, propiedad del mismo dueño y se hallan amparados por la misma petición de licencia, pues la intención de los promotores es que los tres espacios funcionen bajo el mismo paraguas administrativo.

El concejal aseguró que la propiedad de estos locales de ocio debe ahora actuar por la vía administrativa para lograr la licencia de apertura, que requiere la presentación del informe técnico preceptivo y éste, a su vez, de diversos informes específicos, como el de sanidad o el que demuestra la propiedad de los inmuebles, entre otros.

La versión de la empresa impulsora de los locales difiere de la expuesta por el Ayuntamiento. Según un portavoz de la sociedad que gestiona los establecimientos precintados, "llevamos meses peleándonos con el Ayuntamiento para obtener la licencia de apertura y si abrimos sin ella fue porque así nos dieron a entender que los hiciéramos los propios servicios técnicos municipales, algo que, por otra parte, es moneda corriente en Avilés". Este interlocutor sostiene que "los locales tienen todos los informes favorables, pero alguna mano negra se empeña en el Ayuntamiento en bloquear la concesión de la licencia".

La discoteca orientada al público menor de edad recibió el día de su apertura -el pasado sábado- la visita de control e inspección de los policías locales hasta por tres veces, con resultados favorables en todos los casos, asegura el portavoz del negocio, que subraya la falta de relación entre la medida -achacada a causas administrativas- y la actividad que se desarrolla en el local.

"Estamos muy dolidos con la actitud del Ayuntamiento de Avilés, porque además de no dar facilidades para el desempeño legal de una actividad empresarial que enriquece la oferta de ocio en Avilés, parece haber obrado a mala fe para causarnos un grave daño: el precinto de los locales horas después de que uno de ellos abriese al público con gran éxito genera mala imagen, compromete la inversión realizada y siembra incertidumbre sobre los contratos apalabrados con diverso artistas y personajes televisivos que tienen previsto venir a Avilés en fechas próximas", manifestó el portavoz empresarial.

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