La Fundación del Niemeyer adeuda en la actualidad a proveedores 1,3 millones de euros tras la polémica gestión de la anterior etapa, de aquella con Natalio Grueso al frente, según refleja la auditoría a las cuentas de 2015 que se puede consultar en la web del centro. La entidad comenzó el proceso para devolver íntegros los 1,6 millones que les adeudaba en 2013 y tendrá que abonar lo que resta antes de 2018, en anualidades del 20 por ciento, como mínimo. Después, como establece el convenio aprobado en 2013, tendrá que devolver 1,3 millones más por la revocación de subvenciones durante la dirección de Natalio Grueso.

La entidad cerró el pasado ejercicio con unos ingresos de 2.553.601 euros y unos gastos de 2.541.788, lo que arroja un superávit de 11.812 euros. Es el tercer año consecutivo en positivo y el segundo en el que la auditoría a las cuentas se cierra sin salvedades. El centro recibió de sus patronos 1,2 millones de euros, la práctica totalidad de las arcas públicas (Principado, Ayuntamiento de Avilés y Puerto), pero por primera vez se refleja en las cuentas las aportaciones privadas: 131.500 euros que provienen en su mayoría de Asturiana de Zinc (Azsa) y el Grupo Daniel Alonso.

La propia actividad del centro generó ingresos por valor de casi 300.000 euros (51.000 euros más que en 2014) y cerca del 60% de esta suma proviene de la programación de teatro (178.023 euros), la actividad que más gasto genera (272.793 euros en 2015). Le siguen en desembolso las exposiciones (228.294 euros), que propiciaron unos ingresos de 69.227 euros. La taquilla del cine aportó a las arcas del Niemeyer cerca de 6.000 euros, 32.717 la programación musical y 6.539 las visitas guiadas.

El pago de las nóminas al director del Niemeyer, Carlos Cuadros, y al técnico de apoyo supuso un gasto de 120.824 euros para el complejo cultural de la ría. El gasto de personal en 2009 fue 2,3 veces mayor. La entidad abonó ese ejercicio, cuando el complejo se encontraba en obras, 282.323,66 euros a su plantilla, entonces integrada por tres personas. Aquel año la Fundación del Niemeyer gestionó 1,3 millones y 947.595 euros se destinaron a viajes, lo que representa casi el 70 por ciento de sus gastos. Entonces el proyecto cultural avilesino se encontraba en plena fase de promoción. El capítulo de gastos en viajes, según la auditoría de 2015 realizada por Centium, no superó los 3.000 euros, lo que hace una media de 191 euros al mes.

La lectura de la auditoría permite conocer de forma minuciosa el desglose de los gastos del Niemeyer. Por ejemplo, la factura de la luz y el agua ascendió el año pasado a 152.514 euros, en reparaciones y mantenimiento se fueron 92.598 euros, 81.397 euros en seguridad, 46.220 en abogados y notarios (la entidad se encuentra en litigio con los exgestores de la entidad) y 31.660 en limpieza. La Fundación del Niemeyer prevé ingresar este año por la programación 244.000 euros.