La Guardia Civil ha detenido a tres personas que se dedicaban supuestamente a la venta de vehículos de segunda mano con el cuentakilómetros modificado. Los delitos que se le imputan son los de estafa continuada y falsedad documental, y se ha procedido al cierre del local utilizado para realizar las transacciones.
La operación, que comenzó a principios de año, ha sido desarrollada por agentes del Grupo de Investigación y Análisis de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil de Asturias con la colaboración de agentes de Cantabria y de Vizcaya, comunidades de procedencia de varias de las víctimas, además de contar también con la colaboración de las estaciones de ITVs de Pontevedra, Léon, Segovia, Madrid, Guadalajara, Toledo, Badajoz, Sevilla, Málaga, Murcia, Zaragoza y Barcelona, lugares donde habían pasado la última Inspección Técnica los vehículos manipulados.
La investigación se inició con la denuncia de una de las víctimas, que puso de manifiesto a la Guardia Civil sus dudas sobre la posible manipulación del cuenta kilómetros de un coche que había adquirido en un local de compra-venta de vehículos de segunda mano situado en el municipio de Corvera de Asturias.
Del total de los 48 vehículos investigados, se pudo detectar a 20 de ellos con el cuentakilómetros manipulado, en algunas ocasiones en más de 125.000 kilómetros, hecho este que elevaba el precio del turismo.
La manipulación del cuenta kilómetros en sí misma no es un delito, pero sí lo es cuando se aprovecha para cometer una estafa. Las ganancias superaban el 100% del coste de compra, siempre según la versión del Instituto Armado.
El modus operandi utilizado era la compra de vehículos fuera de Asturias con un elevado número de kilómetros a un precio de mercado bajo, para posteriormente manipular el cuentakilómetros y venderlos a un precio muy superior del que lo habían adquirido, consiguiendo de este modo sustanciales ganancias económicas.
Unas ganancias que superaban el 100% del coste de la compra en algunos casos, llegando incluso a vender un coche tras su manipulación por 10.500 euros, cuyo coste inicial fue de 5.000 euros.
"Es destacable que junto con la estafa económica, está el riesgo que supone para la seguridad vial el circular con un vehículo que no reúne las condiciones que se piensa o la mayor contaminación medioambiental generada. A todo ello se suma la competencia desleal establecida con los demás comerciantes que actúan conforme a la ley", han comunicado fuentes de la Guardia Civil.
Las víctimas, procedentes de Vizcaya, Cantabria y Asturias compraban los vehículos muy por encima de su valor real sin ser conocedoras de los kilómetros reales del turismo adquirido, según la misma versión.
El resultado de la operación se saldó con tres personas detenidas, todas ellas responsables del local de compra-venta: M.V.P., de 42 años, G.I.V.R., de 42 años y J.M.S.G. de 45 años.
Las diligencias han pasado al Juzgado de Instrucción número 5 de Avilés.
