Además de la conferencia sobre las personas sin hogar, con motivo de la celebración de inicio del curso, ayer también se celebró una misa en la iglesia de San Agustín, que estuvo presidida por Juan Manuel Suárez, delegado arciprestal de la entidad, y que estuvo celebrada por varios sacerdotes de Avilés. Tras el oficio, a las 19.00 horas, se sirvió un aperitivo a los voluntarios y trabajos de Cáritas en el mueblero de la formación arciprestal. Durante el año pasado, Cáritas dio ayuda a un total de 1.021 familias, llegando de esta manera a 2.564 personas. Para ello, realizaron un gasto superior a 420.000 euros. Las principales vías de financiación de este organismo son las cuotas de sus socios, las cuestaciones populares y las donaciones a título particular. Además del programa de acogida, este curso Cáritas pondrá en marcha la bioescuela de Valliniello, talleres de cuidados a mayores, roperos y programas de reinserción laboral entre otros.