La exdiputada nacional por el PSOE y ahora alcaldesa de Avilés, Mariví Monteserín, destaca como uno de los principales retos de este mandato y de los futuros frenar la caída demográfica e, incluso, revertir el proceso. "A finales del siglo pasado éramos uno de los concejos más jóvenes de España y ahora la tendencia es la contraria; Avilés tiene infraestructuras y servicios diseñados para atender con holgura a noventa mil personas... Nos faltan diez mil y deberíamos ponernos a trabajar para encontrarlas", destacó. La regidora avilesina parte de la base de que Avilés tiene un sustrato propicio para recibir inmigrantes, toda vez que en la década de los años sesenta del pasado siglo fue tierra de acogida al calor del desarrollo industrial "y nos fue bien, por lo que aspiro a reeditar ese hito". Para Monteserín, la caída poblacional y el envejecimiento demográfico son, según se miren, más que dos problemas, dos oportunidades. "Trabajamos para facilitar la integración a quienes buscan un hogar y somos conscientes de que el alto porcentaje de población mayor constituye un nicho de actividad económica y profesional en tanto que debemos cubrir unas necesidades de asistencia, ocio, salud, etcétera", subrayó.