"Fabes de Mayo" nació para ser un grupo de temporada, como el nombre que recibe la banda que se formó en 2013, pero no fue así, tienen música para todo el año. Curiosamente su primer concierto fue un mes de mayo, eso sí no había fabes ni ninguna legumbre sobre el escenario. Lo que sí había eran ukeleles, un instrumento de cuatro cuerdas que tocan cinco de los seis miembros de la banda. Fer Martínez toca además guitarra, contrabajo y xilófono; Eleanor Heneghan, el acordeón melódico y el xilófono; Juan Sancho es también guitarrista, Melanie Moers juega con el acordeón diatónico, y el contrabajo mientras que César Díez y María Rodríguez solo tocan el ukelele.

Los primeros pasos del grupo los dieron Gelo Suárez y Fer Martínez. Fueron a una boda y se arrejuntaron a César y Melanie y posteriormente entró María. Gelo ya se había marchado como ocurrió con Jon y Brian, que se llevaron consigo hasta su apellido.

Su estilo es folk aunque alguno de sus miembros quiera ponerle el matiz de folk mágico. Aún así, prefieren huir de las etiquetas. Lo que es seguro es que la banda es instrumental. "Hacemos música tranquila y los conciertos con poca gente, más íntimos, son los que más nos gustan", expresa Martínez. Suelen tocar a pelo, sin amplificación y sin microfonar, una cuestión que consigue mejorar el sonido del instrumento base de la banda, esa guitarra pequeña de cuatro cuerdas que los hawaianos tocan en sus melodías tradicionales.

Ensayan a caballo entre Arnao y Villaviciosa y aunque últimamente están un poco parados, la banda ha tocado en mil y un lugares: El Bierzo, Burgos, en Toulousse y Carcasson (Francia), entre otros. En mayo, otra vez mayo, de 2015 grabaron su primer disco homónimo. Contiene once temas y uno de ellos "La neige qui tombé" recibió un premio Amas a la mejor canción folk de ese año. Ahora ya están pensando en temas nuevos y ponerse las pilas para en unas semanas volver a ensayar. "Tocamos donde nos llamen y queremos salir de Asturias", destaca Fer Martínez, que no se cansa de tocar el ukelele.