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DANIEL H. VAQUERO | Jefe de Traumatología del San Agustín y recién nombrado catedrático

"En el San Agustín sería interesante trabajar la faceta de la investigación"

"El hecho de contar con muchos hospitales beneficia a los alumnos, tienen mucha relación con la práctica clínica"

Daniel Hernández Vaquero, en su despacho del Hospital San Agustín. MARA VILLAMUZA

Daniel Hernández Vaquero, jefe del servicio de Traumatología del Hospital Universitario San Agustín, es también desde hace unos días catedrático asociado a la Universidad de Oviedo. Este extremeño, que estudió Medicina en Salamanca y se especializó en León, hace un llamamiento a la renovación de los docentes en la Facultad de Medicina de Oviedo, y a que el centro hospitalario avilesino apueste de forma decidida por la investigación.

-Compatibiliza usted el trabajo en el San Agustín con la docencia.

-El San Agustín es hospital universitario desde hace un año. Pero siempre hubo relación entre la Universidad de Oviedo y el hospital. Ahora lo que se produjo es un concierto de la Universidad con el Sespa para el HUCA, el Cabueñes y el San Agustín. Profesorado de la universidad ha habido aquí siempre. Hemos tenido siempre alumnos de medicina, residentes. Ahora las relaciones ya se han institucionalizado, ya es un hospital universitario.

-¿Y eso qué supone?

-Lo que se pretende es que el hospital se involucre más en la enseñanza universitaria, sobre todo en el pregrado. El último año de pregrado, el sexto, se hace ya en el hospital. Sólo van a examinarse a la Universidad. Supone para el hospital entrar en una nueva disyuntiva, y significa un estímulo importante para los profesionales del hospital. Además se van a crear plazas de profesores de la Universidad. De hecho ya se han creado este año.

-¿De qué profesores estamos hablando?

-Profesores titulares aquí ya hubo de varias especialidades, y también profesores asociados. En la Universidad hay dos tipos de profesores. Los asociados, que es como la primera etapa. Y luego ya están los funcionarios. Este año se han creado nuevas plazas de profesores asociados, concretamente siete. Y luego el siguiente paso es el de los profesores titulares y catedráticos, de los que de momento estoy. Es un primer paso pero lo ideal es que esto tenga continuación, que se vayan incorporando otras personas a la Universidad.

-¿Cómo es ese proceso?

-La Universidad ha cambiado mucho la oferta de plazas. Ahora todas las plazas tienen que estar acreditadas por la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (Aneca). Tienes que presentar tu currículo para que te acepten y te acrediten. Y luego la universidad saca o no la plaza, pero tienes que estar acreditado. Yo lo estoy desde 2012, pero hasta ahora no hubo plazas. Lo deseable es que gente del hospital pueda acreditarse y la universidad crear plazas. Acreditarse es muy complicado, sobre todo en un hospital como este que es sobre todo asistencial. Exige mucha investigación, es el 70 por ciento de la acreditación, mientras que el otro 20 por ciento es docencia y solo un 10 por ciento la parte asistencial. Es difícil, pero hay que involucrarse en la universidad. Y luego está la universidad, que en estos momentos esta bastante disponible a crear plazas, porque la plantilla está muy envejecida.

-¿En general, o específicamente en Medicina?

-En Medicina sobre todo. Hay bastante profesorado en las llamadas preclínicas, pero a partir de tercero, donde los docentes ya son médicos, hay muy pocos y muy mayores. Hace unos años profesores vinculados como yo había 70, ahora hay 40. Es un problema que tiene la facultad de Medicina.

-¿A qué se debe esa escasez de profesores?

-Tienen que ser profesionales con un perfil un poco especial. Pasa en toda España. Tienen que dedicar tardes y fines de semana, además la sociedad no valora mucho al profesor universitario y económicamente tampoco te compensa. Tiene que interesarte realmente. No puedes tener actividad privada...

-¿Cómo le sienta al San Agustín su nueva calificación de universitario?

-Bien. Esto es una etapa más. El objetivo ideal sería que aumentar el número de profesorado, que es el germen de futuro. Y que el hospital contemplara que pudiera dedicarse alguien a investigación. Porque además de que lleguen alumnos, sería interesante trabajar la faceta de la investigación, publicar trabajos, estar al día. Es complicado en un hospital como éste, con lista de espera... Pero para que sea universitario como tal sí tendría que permitir que se compatibilizara la actividad asistencial con la investigación. Hay que aprovechar esta corriente de optimismo que ha creado este nuevo nombre. Si no se hace nada, sólo tendrá el nombre.

-Hablaba antes de la escasez de profesores de Medicina. No ocurre sin embargo lo mismo con los alumnos.

-En Medicina hay números clausus. Yo doy clase en Medicina, Odontología, Fisioterapia, Medicina del Deporte. En total unos 300 alumnos. Y yo soy el único profesor de Traumatología de la Universidad, la carga es muy grande, haría falta más profesorado. En cuanto a los alumnos, hasta ahora es bastante similar el número de titulados y el de plazas que se ofertan. Pero se han creado muchas facultades de Medicina nuevas y habrá un exceso de médicos.

-¿Es buena la salud de la Facultad de Medicina de Oviedo?

-Sí, es una facultad prestigiada, los alumnos tienen siempre muy buenos resultados en el MIR de Medicina. El hecho de no tener un hospital clínico pero tener muchos hospitales beneficia a los alumnos, tienen mucha relación con la práctica clínica. Y tenemos una red muy buena de hospitales en Asturias.

-¿Y cómo funciona la facultad, sin una sede única?

-Bien. La facultad antigua tiene a los alumnos de primero y segundo, de tercero a quinto están en el HUCA y los de sexto en los hospitales. Al principio se pensó en una facultad de Medicina, por razones económicas no se hizo, pero no es un problema importante.

-¿Están a gusto los alumnos que pasan por el Hospital San Agustín?

-Quedan muy contentos de las prácticas en el hospital. En las encuestas el San Agustín queda siempre primero o segundo. En estos hospitales es más fácil que uno esté a gusto que un hospital más grande. Aquí conocen a la gente. Este año que pasan con nosotros completa la formación del estudiante y les hace ver que la Medicina no es teoría. Relación con el paciente, que sepan cómo se trata... La facultad es algo puramente teórico. En sexto entran en contacto con la función humana de la Medicina.

-¿En qué notan los pacientes que el San Agustín es universitario? ¿En que habrá un estudiante al lado del doctor en la consulta?

-Sí, normalmente se les dice al paciente que hay un estudiante de Medicina al lado. El eje del hospital es el paciente, no el alumno ni la enseñanza. El paciente acepta voluntariamente que aprendan con él, pero hay que pedirle permiso.

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