"Muchas casas que se rehabilitaron están ahora en venta o alquiler". El presidente de la Asociación de vecinos de Miranda, Félix Rodríguez, explicó que los años de mayor actividad constructiva en este núcleo de población fueron hasta que la crisis comenzó a hacer incidencia, y que además, por encima de las viviendas de nueva planta, lo que realmente primó fue la rehabilitación. Son esas casas a las que se refiere como vacías ahora. "Muchos matrimonios y parejas jóvenes se desunieron y terminan marchando; hay unas cuantas casas en venta o alquiler", explicó.
Y es que, según Rodríguez, hubo parejas que invirtieron mucho dinero, y ahora, al intentar deshacerse de la vivienda, no resulta fácil para al menos no perder el dinero invertido.
"En el Alfaraz Viejo se vende todo. Y en la urbanización se venden también muchísimos pisos", añadió el presidente vecinal.
Lo que Félix Rodríguez asegura es que esta actividad constructiva no se traduce en ver caras nuevas por la localidad, eso apenas ocurre los fines de semana o los días festivos: "Miranda se está volviendo ciudad dormitorio. Viven muchas parejas donde trabajan los dos y sólo van a casa a dormir". Eso sí, los fines de semana es fácil ver por Miranda matrimonios con niños, afirma. "Es agradable, porque la gente que reside en Miranda es de edad bastante avanzada", concluye.
