"Una mujer que perpetúa los estereotipos de género". Así es, para IU, el diseño del cartel de 8 de marzo, que muestra a una mujer en el papel de superheroína, calzada con zapatos de tacón, y arrastrando, con estilo, un montón de lastres, como son hacer la compra y estar guapa. La concejala de IU Llarina González afirmó que, aunque se pueden hacer dos lecturas diferentes del significado del cartel, incluso la más positiva de ellas tiene partes negativas.

"Desde diferentes colectivos feministas están quejándose, poniendo el grito en el cielo. Nos preguntamos qué cartel es este y por qué se ha escogido un cartel que no representa lo que entendemos por feminismo", arremetió González. IU calificó este cartel de "horrible", no en términos estéticos sino políticos.

Llarina González desgranó las críticas, que comienzan por la descripción física de la mujer del cartel. "Tiene unas medidas perfectas, 90-60-90, unas tetas perfectas, va maquillada, con tacones, el color rosa es el que domina... Y además, con el lastre que lleva, lo que se da a entender es que la mujer es una súper mujer porque puede llevar toda esa carga, y además eso es lo bueno". Es decir, abundó la concejala de IU, es súper mujer no porque se rebela, sino al contrario, porque tiene la capacidad de poder llevar todas las tareas a cabo".

Este discurso va en contra del feminismo que defiende IU, de romper con esos estereotipos de género. "No tenemos que hacer la compra ni estar guapas por ser mujeres, o seguir los cánones del patriarcado para ser perfectas o deseadas, ni limpiar la casa ni cuidar los hijos por ser mujeres. Y con este cartel se naturalizan y dan como normales todos los roles socialmente asociados a las mujeres". Y añadió: "Ya que es lo lógico, vamos a ser súper mujeres superándolos, con orgullo y con taconazos de infarto, con cuerpo perfecto y tiempo para pintarnos los labios".

Esta crítica radical al cartel la comparten, según IU, otros colectivos femenistas. Entre todos estudiarán qué acciones seguir para expresar su rechazo a este diseño, que surgió de un concurso y que fue aprobado por el consejo superior de la mujer y avalado por la concejala de Igualdad.