El pasado domingo hubo relevo en la portería del Avilés para recibir al Llanera (2-0) con la vuelta de Esteve Peña por Lucas Anacker. El joven guardameta balear (19 años) empezó la Liga como titular y había jugado 20 partidos, pero estuvo ocho semanas fuera al sufrir una rotura de fibras en el cuádriceps derecho frente al Llanes en el Suárez Puerta. La recuperación le llevó cuatro semanas y otras cuatro fue suplente del Lucas Anacker, el también joven portero brasileño de 20 años.

Esteve no esconde las "muchas ganas" que tenía de volver al once. "Para eso estamos todos aquí porque lo que queremos es jugar. La lesión me obligó a esperar y después de trabajar duro durante este tiempo, como todos, este fin de semana tuve la oportunidad y espero poder seguir así".

El equipo afrontó el partido ante el Llanera con la herida abierta una semana antes en El Sotón por la "manita" que le endosó el Lenense (5-7), y uno de los objetivos marcados era dejar la portería a cero. El final se consiguió. "No encajar es muy importante porque sabes que al menos sumas un punto y tres si metes, pero no es fácil porque esto es fútbol y los rivales son buenos y saben jugar, por eso es un trabajo de todo el equipo".

El partido del retorno fue tranquilo. Esteve no tuvo más trabajo que atajar un tiro lejano del rival, pero recuerda que siempre hay que estar concentrado. "En el fútbol todo puede cambiar en cualquier momento y en una jugada aislada te pueden crear peligro y hacer gol, pero nuestro trabajo es evitarlo a lo largo de los 90 minutos", señaló. "Lo importante es que las sensaciones que dejó el partido fueron muy buenas y ahora a seguir sumando", añadió.

Tanto Esteve como Lucas son muy jóvenes, como lo es Castro que está cedido al Condal y tiene 18 años, y desde el inicio de la Liga surgieron dudas en el club sobre la necesidad de incorporar un portero de más experiencia, pero Esteve recuerda que la experiencia se gana jugando. "Los goles que nos metieron este año son complicados porque fueron muchos a balón parado y eso al final lo vamos a ir arreglando poco a poco. Lo importante es seguir con la portería a cero todo lo que se pueda", defendió.

El Avilés es líder y Esteve ve muy bien al equipo "desde que empezó la Liga", y la mejor demostración, señala, es el liderato. "No es fácil estar ahí arriba porque la Liga es regularidad y se tienen que ganar muchos partidos para ser primeros. Y si nosotros lo somos es porque el trabajo se está haciendo bien a pesar de que tenemos bajas".

La segunda vuelta de la Liga se presenta apasionante y Esteve considera que es "una ventaja" que todos los rivales directos del Avilés tengan que pasar por el Suárez Puerta, excepto el Oviedo B. "Creo que nos favorece jugar en casa, aunque en un partido puede pasar cualquier cosa. Esperamos trabajar bien, competir bien y sacar los tres puntos ante nuestros rivales". Unos rivales, recordó, que son buenos. "Son equipos con mucha calidad, y nosotros lo que tenemos que intentar es ir sumando partido a partido porque así seguirán detrás".

La Tercera asturiana es una categoría totalmente desconocida para el portero balear, que se formó en la cantera del Valencia, y destaca su calidad. "Tiene mucho nivel, con jugadores y equipos muy buenos. Es una competición difícil, pero yo creo que vamos a conseguir nuestros objetivos de meternos en el play-off primero, si es posible como campeones, y después el ascenso".

La exigencia es máxima, sobre todo tras la llegada de IQ Finanzas, pero no asusta a Esteve. "Nosotros estamos para trabajar y tratar de mejorar cada semana para lograr buenos resultados y seguir en cabeza. Esa es nuestra exigencia". Y concluyó. "Tengo tres años firmados con el Avilés y el próximo año me veo jugando de blanquiazul en Segunda B porque para eso trabajamos".