Los trabajadores de la factoría avilesina de Saint-Gobain Cristalería de Avilés aseguran que la delegación del Mediterráneo de la multinacional francesa está desvistiendo un santo para vestir otro. En sólo nueve años, señala el comité de empresa, ha reducido a la mitad su producción de parabrisas (bajo la marca Saint-Gobain Sekurit) de la planta de La Maruca y, sin embargo, está lanzando su instalación más moderna, la de la localidad marroquí de Kenitra, a 40 kilómetros al norte de Rabat. El comité de empresa señala que la fábrica avilesina fabricaba antes de la crisis 2,5 millones de parabrisas, "1,2 millones más que en 2017 con la misma situación de mercado". La explicación que los trabajadores dan a este recorte de producción está en el lanzamiento de sus instalaciones en el norte de África.

La multinacional francesa Saint-Gobain se instaló en Marruecos en 1999, pero no fue hasta 2014 cuando abrió la primera línea de fabricación de parabrisas -el mismo producto que se fabrica en Avilés-. Un año después abrió una segunda línea con capacidad, aseguran los sindicatos, para producir 0,9 millones de parabrisas al año. La importancia de la fábrica de Marruecos -que inauguró el español Ricardo de Ramón, el anterior delegado Saint-Gobain en el sur de Europa- se debe a su cercanía a una planta de Renault.

Los trabajadores avilesinos no son capaces de entender que la multinacional renuncie a la experiencia de Avilés -la fábrica lleva más de medio siglo en el concejo- en favor de Marruecos, más si cabe porque, aseguran, cuando "en 2017 las previsiones son construir tres millones de vehículos y Sekurit Avilés sólo va a fabricar, 1,35 millones de parabrisas". Se da la circunstancia, además, de que "los cuatro últimos modelos que hemos desarrollado en Avilés se van a fabricar en Marruecos", pero no serán los únicos. Los sindicatos señalan que la delegación del Mediterráneo "quita" otros modelos que sostienen la viabilidad de la fábrica: "Tenemos claro que si no hacemos algo para intentar revertir la situación, el futuro de Sekurit en Avilés es incierto". La planta de La Maruca se quedaría únicamente con la planta con la producción de Saint-Gobain Glass (vidrio para construcciones) y con un centro de desarrollo disminuido, habiendo llegado a ser uno de los principales de la multinacional en Europa.

Esta situación ha sido uno de los motivos principales de la huelga desarrollada en Avilés desde el pasado día 11 (el otro, el mal ambiente generado en el trabajo con la aplicación de expedientes, según los trabajadores, a discreción). El martes que viene es el último día de huelgas parciales aprobado por las asambleas de trabajadores y será entonces cuando una delegación de trabajadores se entrevistará con la alcaldesa de Avilés, Mariví Monteserín, para transmitirle el estado actual de las cosas. Previamente, se han convocado dos concentraciones (a las 11.00, delante de la fábrica, y a las 16.00 horas, en el Parche). Los trabajadores están esperando, del mismo modo, una entrevista con el consejero de Industria, Francisco Blanco.

Los representantes de los sindicatos CC OO y UGT aseguran que consensuarán "todos y cada uno de los pasos a dar" a partir del final del primer calendario de movilizaciones.

Saint-Gobain Cristalería es una sociedad que en los últimos años ha reducido profundamente su presencia en España, tan es así que ha pasado de cinco centros de producción a sólo dos.