El mentalista Toni Bright, uno de los ilusionistas más reconocidos del país, se estrena en el Niemeyer este sábado (20.30 horas) y se muestra dispuesto a contagiar de su optimismo al público y dejarlo con la boca abierta, algo que le "encanta" ver desde el escenario, porque lo que busca es que la gente "contemple el mundo de otra forma" al salir de su show.
-Su espectáculo se llama "Volver a creer". ¿En qué quiere que crea su público?
-Quiero que la gente crea en sí misma, que es lo más importante. Si solamente tenemos fe, esperanza, convicción y pensamientos positivos, todo lo que queramos podrá hacerse realidad.
-Su show puede ser una muestra de que todo es posible. ¿Que pueden esperar los espectadores de su actuación del sábado?
-Es un espectáculo ameno, divertido, a partir de seis años lo puede ver todo el mundo. Podrán ver desde un tenedor que se retuerce, se dobla y se rompe con la mente hasta como contacto, entre comillas, con un espíritu.
-¿Cómo va eso de contactar entre comillas?
-No puedo decir más, hasta ahí puedo contar. Tendrán que verlo en el Niemeyer, pero suele sorprender mucho. Quiero que la gente lo vea, lo sienta y que lo viva. Siempre hay un feedback con el público. Notas si lo están pasando bien y me gusta mucho ver las caras de asombro que ponen. Eso es lo bonito para un mentalista.
-¿Cuándo se decidió a dedicarse a la magia?
-Desde pequeño, siempre me ha gustado la magia de la mente. Me sentaba con mi padre a ver magos en la tele. Es bonito convertirse en uno de ellos con los años.
- ¿Cómo se aprende magia de pequeño?
-Con libros, leyendo muchos libros. A veces, me preguntan como aprender magia y es lo que les digo, pero también hay gente que me contesta que si utilizas compinches no hace falta ningún libro. En mi espectáculo participan unas quince o veinte personas del público a las que no he visto antes, no tengo compinches como otros que se llaman magos. Por ejemplo, el Mago Pop, de la tele, los utiliza y quiero que se sepa, porque me parece muy feo. Una cosa es ilusionar y otra muy diferente es engañar.
-¿Ha habido algún mago que le marcara, algún referente?
-Uno siempre tiene que seguirse a sí mismo. Cuando me preguntan qué serie de la televisión sigo respondo que ninguna, sigo mi vida, porque si lo haces, al final ves que tu vida es la serie más divertida.
-Los espectáculos de magia, ¿tienen buena acogida?
-Sí, pero creo que los magos y mentalistas somos los olvidados de la profesión. Se programan muy pocos espectáculos, más teniendo en cuenta lo que los disfruta la gente.
