El director de la Fundación ITMA, de la que depende el centro tecnológico de los materiales de Avilés, Íñigo Felgueroso, ha defendido en una comparecencia en la Junta General del Principado que la institución está fuera del ámbito de fiscalización económica de la Sindicatura de Cuentas y que así ha quedado probado en diversa documentación que puso a disposición de los diputados. Felgueroso responde de este modo a las acusaciones del síndico mayor Avelino Viejo, quien en una pasada intervención en la Junta habló de "una operación anómala que tenía por propósito, entre otros, sustraerse a la fiscalización de la Sindicatura de Cuentas y escapar a los controles del sector público autonómico".
De acuerdo a la posición expresada por el representante de la Fundación ITMA en su comparecencia ante la Junta General del Principado de Asturias "el ITMA no cumple lo establecido en el artículo 2 de la Ley 3/2003, de 24 de marzo, de la Sindicatura de Cuentas de Asturias, en el que se señala que el sector público autonómico al que podrá extender su ámbito de actuación este órgano está integrado por 'la Administración del Principado de Asturias y sus organismos, entes, entidades, fundaciones y empresas públicas, con participación mayoritaria o dominio efectivo, directo o indirecto, del Principado, independientemente de que se rijan por el derecho público o privado'.
En el caso de ITMA, según ha abundado Felgueroso, "no se dan ninguno de los dos requisitos establecidos en dicha norma legal, dado que el porcentaje de voto de la Administración del Principado, conforme a sus estatutos, es sólo del 33 por 100 y su participación en la dotación fundacional nunca ha sido mayoritaria".
Al respecto de la polémica renuncia realizada el 26 de octubre de 2007 por parte del patronato del ITMA al derecho de uso sobre los bienes aportados en su constitución por la Administración asturiana, de modo que se redujo la participación del Principado hasta el 12% al recuperar éste el pleno dominio de los mismos, Felgueroso ha explicado que en este proceso de reducción de la dotación fundacional se siguió un procedimiento y control de legalidad en el que intervinieron diversos operadores jurídicos y órganos administrativos, a saber: el Protectorado de Fundaciones, el Registro de Fundaciones y el Consejo de Gobierno del Principado de Asturias.
Además, prosigue la explicación del director del ITMA, "la Sindicatura de Cuentas fue informada el 5 de marzo de 2008, mediante escrito en el que se recogía la operación efectuada sobre la dotación fundacional, al objeto de aclarar que no existía ningún porcentaje mayoritario de la Administración del Principado de Asturias. Posteriormente, el 30 de diciembre de 2010, mediante un nuevo escrito se vuelve a explicar esta circunstancia". Según ha precisado Felgueroso, por parte de la Sindicatura de Cuentas no hubo contestación a ninguno de los dos escritos hasta octubre de 2014, seis años después de tener conocimiento de la operación. "Momento en el que la Sindicatura de Cuentas considera que pudo causarse un perjuicio patrimonial al Principado de Asturias, recogiéndolo en el Informe definitivo de fiscalización sobre entidades del sector público autonómico que no forman parte de la Cuenta General relativo al ejercicio 2012 y da traslado de su informe al Tribunal de Cuentas y a su Ministerio Fiscal.
El Tribunal de Cuentas, tras iniciar el procedimiento oportuno, emitió un auto que ordena el archivo de las actuaciones, y en el que textualmente se indica en su razonamiento jurídico tercero: "El Ministerio Fiscal señala que se ha acreditado que no ha existido perjuicio patrimonial alguno para la Administración del Principado de Asturias como consecuencia de la renuncia de la Fundación ITMA a sus derechos de uso de edificio y equipamiento propiedad de la Administración, ni ha existido perjuicio alguno como consecuencia de la reducción de la dotación fundacional de la Fundación ITMA contabilizada en el año 2008". Esto es, al menos, lo que ha defendido Felgueroso en su intervención en la Comisión de Hacienda de la Junta esta mañana, para acabar destacando que "la continua aparición de la Fundación ITMA en los informes de la Sindicatura de Cuentas como entidad cuentadante es fruto de la naturaleza pública que le otorgan sin fundamento legal alguno para ello y sin posibilidad de defensa para esta entidad, ya que sus informes carecen de un posible recurso jurisdiccional, y sólo causa un perjuicio de imagen a la Fundación que esperamos ver corregida definitivamente cuanto antes".
