Los vecinos del camino de Gaxín ya no saben qué tecla tocar para que el Ayuntamiento de Avilés les haga caso en sus reivindicaciones. Y es que tras ocho años presentando escritos la paciencia empieza a agotarse. "Pasan los años y los problemas se acumulan", afirma Isabel Fernández, residente de la zona. La lista empieza a ser larga y un día, según los vecinos, puede haber un accidente grave. "Junto a una de las cunetas de la carretera más de un metro de profundidad y no se ve porque está lleno de maleza. Ahí ya se cayeron coches y camiones y no hemos tenido una desgracia de casualidad", asevera Fernández.

La lista no se queda en la cuneta. Los conductores, cada día, tienen que hacer un auténtico slalom para sortear los numerosos baches que hay en la zona. "Muchos vecinos han optado por no ir por esa carretera, que comunica con la calle Fuero, sino ir por arriba, para conectar con la carretera de Miranda, aunque se da más rodeo. Algunos residentes han tenido que cambiar las suspensiones del coche en más de una ocasión", apuntó Isabel Fernández. El mal estado del vial afecta directamente a siete casas.

A finales del año pasado, la asociación de vecinos de San Cristóbal -a la que pertenece Gaxín- celebró su día del socio y a la jornada de convivencia asistió la alcaldesa, Mariví Monteserín. Fernández aseguró que aprovechó esa ocasión para llevarle los escritos que ya han remitido al Ayuntamiento en los últimos años.

La vecina también mostró su indignación porque el Ayuntamiento haya arreglado otro vial cercano, "por el que pasan dos coches al día". "Está asfaltada e incluso le han pintado las líneas. Eso ya fue el colmo y por eso estamos ya hartos de lo que están haciendo con nosotros", aseveró Fernández.