Las educadoras de las tres escuelas infantiles de Avilés (La Toba, La Magdalena y El Quirinal) han decidido iniciar una huelga, "cansadas de ser invisibles" para el Ayuntamiento de Avilés, con el apoyo de los representantes sindicales de la plantilla municipal. "Lo que nos ha llevado a esta situación es que tras varias negociaciones, el PSOE sigue sin tener en cuenta a este colectivo", critican. La huelga, que ya ha sido solicitada ante la autoridad laboral por los sindicatos y se desarrollaría durante el mes de abril, en días alternos aún no determinados.

Las trabajadoras, una treintena de personas repartida en las escuelas de Educación Infantil de La Magdalena, La Toba y El Quirinal, estiman que cobran entre 300 y 400 euros menos al mes de lo que les correspondería en función de la categoría que tienen reconocida por contrato. Del mismo modo, aseguran que carecen de de complementos salariales a los que deberían tener derecho, como el de complemento de destino o peligrosidad, entre otros.

Otra reivindicación del colectivo es acabar con la inseguridad laboral que sufren cada verano y que es debida a los ajustes de última hora que realiza la Consejería de Educación de cara al inicio del siguiente curso y que, en función de la matrícula prevista, se traducen en la no renovación de un número indeterminado de contratos.

"Este agravio del que somos víctimas es consecuencia de que nuestros puestos de trabajo están fuera del marco de la Relación de Puertos de Trabajo del Ayuntamiento; figuramos en un anexo y eso nos condena a cobrar un salario menor al que nos correspondería por categoría y funciones laborales", ha denunciado una de las afectadas por este problemática.

El colectivo educativo tiene previsto convocar la próxima semana asambleas informativas a las que invitarán a asistir a representantes sindicales y a las familias que tienen a niños escolarizados en las escuelinas. Una portavoz de las educadoras ha explicado que el objetivo de esas asambleas es "dar a conocer nuestras reivindicaciones a quienes no las conozcan o tengan dudas sobre las mismas y recabar el apoyo de las familias, que para nosotras es fundamental".

Las educadoras de las tres escuelinas de Avilés tenían depositadas sus esperanzas de hallar una solución a su "precariedad laboral" en las negociaciones que han abierto los sindicatos municipales y el gobierno local de Avilés para poner orden en diversos asuntos laborales que colean desde hace años, "pero nos han hecho saber que no estamos en la lista de asuntos a tratar porque el gobierno así lo ha exigido", apuntan desde el colectivo. Decididas a poner fin de una vez por todas a su problemática, las maestras de bebés han decidido pasar a la acción: "Son muchos años, hasta catorce en algunos casos, soportando esta situación injusta. Y el momento oportuno para decir basta es ahora".

"Seguimos sin tener reconocida la categoría de técnicos superiores en educación infantil pese a haber superado un concurso-oposición y en consecuencia poseemos el salario más bajo del Ayuntamiento y una inestabilidad laboral palpable; esto es insostenible", rematan las educadoras de las escuelinas.