Una joven de 21 años denunció el pasado viernes en la Comisaría de la Policía Nacional haber sido víctima de una estafa en el alquiler de un piso situado en el número 93 de la calle Santa Apolonia y que se publicita en internet. El supuesto propietario pide una fianza de 300 euros, entrega un documento firmado como justificante y desaparece con el dinero. Las personas afectadas por la estafa superan la veintena. Una familiar de la joven compartió el timo del que dice haber sido víctima en las redes sociales el viernes por la noche. En cuestión de horas eran ya quince los vecinos que decían haber sido víctimas de la misma estafa y, al cierre de esta edición, el número seguía creciendo. Muchos de los estafados son beneficiarios del salario social básico, han abierto un grupo de Facebook para organizarse ("Estafados por el alquiler Avilés") y sopesan presentar una denuncia conjunta.

Clara Elena Pérez, una de las afectadas que ha denunciado la estafa en Comisaría, encontró un piso que era "todo un caramelo" en la web milanuncios.com el pasado abril. El precio de alquiler: 350 euros al mes con garaje, 300 sin él. Contactó con el anunciante a través de un teléfono móvil y le pidió que le mandara unas fotografías vía Whatsapp (el anuncio no incluye imágenes de la vivienda). Siempre según su relato, y tal como recoge su denuncia, quedó con el anunciante, le mostró el piso y llegaron a un acuerdo: el pago de 100 euros en concepto de reserva. "Quedamos el 10 de mayo para entregarle el resto del dinero. Le di 300 euros y me dio un recibo. A partir de entonces comenzó a darme largas y no me entregaba las llaves del piso", explica la joven.

Clara Elena Pérez, que tiene dos bebés de un año y medio y un mes, se enteró de que su amiga Ana Hernández iba a alquilar un piso, que resultó ser la misma vivienda del número 93 de la calle Santa Apolonia. "Yo le di 300 euros por ese mismo piso el 11 de mayo. Se supone que iba a poder entrar en la casa el día 28, pero luego me pedía 100 euros más. Después me dijo que no me podía alquilar el piso, que de devolvería el dinero, pero nos hemos quedado sin nada", señala Hernández, que tiene ocho hijos, seis de ellos a su cargo. Lo que recibe del salario social se le ha ido en la supuesta estafa. "Nos hemos quedado sin nada, mis hijos apenas han comido, me tiene que ayudar mi madre", asegura.

Estas dos mujeres intentaron hacer una encerrona al supuesto estafador hace unos días. Al final, el hombre entregó un juego de llaves a Clara Elena Pérez, pero no abre ni el portal ni el piso que supuestamente había pagado. Dicen que el presunto timador ya fue denunciado por hechos similares en 2016. Como ellas, hay un reguero de vecinos que afirman haber sido víctimas de la misma estafa. Al teléfono de una de ellas no paran de llegar mensajes. Uno de los últimos: "Se lo han hecho a mi hermano también. Tiene 24 años. Supuestamente entra en el piso el lunes".