La Policía Local de Avilés realizó entre el 5 y el 11 de junio 353 pruebas de alcoholemia, de las que tan solo 9 fueron positivas. Tras ellas, tres conductores fueron detenidos por un delito contra la seguridad vial: tasas superiores a los 0,60 miligramos por litro de aire espirado. Además, los agentes, dentro de la campaña de la Dirección General de Tráfico, también dieron el alto a un conductor profesional de transporte de mercancías por conducir ebrio -le inmovilizaron el vehículo-, mientras que otro, además de positivo en alcohol, lo dio en drogas.

La Policía también realizó un control la madrugada del martes al miércoles. De las 33 pruebas de alcohol practicadas, sólo una fue positiva. El conductor fue denunciado por circular con una tasa superior a la permitida (0,25 miligramos). Además, otro coche tenía la ITV con resultado desfavorable, otro sin intermitentes y un hombre fue denunciado por faltas de respeto a los policías.