Los bocinazos son la molesta rutina de muchos lunes en Avilés y el de ayer no fue excepción. El tráfico, que suele congestionar el centro avilesino con motivo de la celebración del mercado semanal, paralizó ayer durante casi media hora las calles de acceso y salida de la plaza de Pedro Menéndez. Muchos de los vehículos "atrapados" en el caos correspondían a los propietarios de los puestos ambulantes del mercado. "Estos atascos semanales son debidos a un error de organización municipal por no permitir la salida de la plaza por la calle de la Cámara (por el tramo peatonal)", comentaron los afectados.
Las calles del centro de Avilés estarían más descongestionadas si las autoridades permitiesen, según los titulares de los puestos ambulantes, que las furgonetas de mercancía tuviesen un segundo acceso por La Cámara. "No quieren que nos vean los turistas y nos dejan aquí atrapados tres horas", recriminaron. Aseguran que muchos vendedores se ven obligados a llevar sus mercancías en brazos por no poder mover su vehículo. La Policía Local apuntó que la apertura de la Cámara generaría riesgo de atropellos. "Ya abrimos la plaza media hora antes de lo acordado para aliviar el tráfico, pero abrir una calle peatonal no es viable", subrayó un portavoz policial.
