La comarca avilesina tiene su propio "Café del Mar". El paseo marítimo de Salinas es el punto de observación preferido por cientos de personas para disfrutar del ocaso. En jornadas despejadas, como la de ayer, los bañistas toman los prados del paseo y disfrutan de los últimos rayos de sol, una postal que nada tiene que envidiar a la del famoso atardecer ibicenco.

El entorno de Los Gauzones se convierte en un hervidero y son muchos los que ya horas antes de la puesta toman los jardines cerveza o refresco en mano para lograr la mejor ubicación y despedir la jornada entre los últimos estallidos de luz.

Los atardeceres asturianos son espectaculares en cualquier época del año, pero en el caso de la bahía de Salinas el verano es el mejor momento. Y es que a partir del otoño el sol desaparecerá de la línea del horizonte por detrás de la península de La Peñona, lo que impide ver el momento mágico en el que el astro rey se sumerge en el horizonte.

El atardecer de Salinas no es el único de la comarca avilesina que gana adeptos. También son muchos los que disfrutan del ocaso en Verdicio y Peñas (Gozón) y los que permanecen fieles al atardecer de Los Quebrantos (Soto del Barco).