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Las secuelas de los malos tratos en el hogar

"Me parte el alma que mi hijo viva este proceso", dice la mujer que huyó con el niño

La avilesina acusada de sustracción del menor y absuelta por la Audiencia se llevó al pequeño a Madrid "porque temía por nuestras vidas"

"Me parte el alma que mi hijo viva todo este proceso", confiesa la avilesina condenada por un delito de sustracción de menores por el Juzgado de lo Penal numero 2 de Avilés y absuelta recientemente por la Audiencia Provincial de Oviedo al revocar la sentencia dictada en las dependencias de la calle Marcos del Torniello.

La Audiencia considera que no pueden derivarse consecuencias penales de la conducta de la madre, que tiene la guarda y custodia del pequeño y que huyó con éste a Madrid por miedo hacia su expareja y padre del pequeño, acusado de malos tratos. "Me lo llevé porque temía por nuestras vidas, entendía que tenía que protegernos; por eso me fuí", señala para añadir que "una vez que me sentí a salvo lo comuniqué y ahora me estoy dejando la vida en cumplir el régimen de visitas" ya que ha establecido su residencia en la capital.

Dice sentirse "muy satisfecha con la resolución y feliz, sobre todo, por mi hijo; en una situación así los niños son los más afectados". El fallo judicial, contra el que no cabe recurso es, destacó, "el punto de partida para empezar una nueva vida, aunque el sufrimiento es difícil de reparar y genera inseguridades y un permanente estado de alerta".

No obstante, y a pesar de la sentencia favorable de la Audiencia, esta mujer cree que los problemas con su ex marido " no se acaban aquí" ya que cuenta con numerosas denuncias que ha presentado contra ella. "Me denunció constantemente y por diferentes motivos, todos los días venían a atraerme una notificación", comenta.

En este sentido, agradece a la Policía y a cuantos profesionales la atendieron en los últimos seis años, entre ellos los abogados José Manuel Rodríguez y Francisco Pérez Platas. "Nos protegieron y me ayudaron a afrontar una realidad que yo no quería ver", indica para seguidamente reconocer que le llevó tiempo aceptar la situación de malos tratos que padeció "porque había concebido el matrimonio para toda la vida".

Actualmente, madre e hijo residen en Madrid, han formado una nueva familia y viajan a Asturias una vez al mes para que el pequeño esté un fin de semana con su padre, así como las vacaciones que le correspondan en función del régimen de visitas.

Como mujer y víctima de malos tratos, dice solidarizarse con todas las que se enfrentan a situaciones de acoso y agresión y "luchan por el bienestar de los hijos, lo más vulnerable. Espero que la justicia siga actuando y que se consiga poner punto final a esta lacra", concluyó.

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