Pedro Cerezo Galán (Hinojosa del Duque, Córdoba, 1935) es el vicepresidente de la Real Academia de las Ciencias Morales y Políticas de España. En virtud de este cargo analizó ayer durante toda la mañana en el chalé de La Granda la figura de Fernando El Católico, el rey que inspiró a Maquiavelo la redacción de "El Príncipe". Conversa con LA NUEVA ESPAÑA en el porche de la residencia de Arcelor, que acogió ayer el quinto seminario incluido en los cursos de verano de La Granda.
- ¿Es Fernando el Católico el primer gobernante moderno?
-Pues sí, es el rey que hace la transición desde el Estado medieval, teocrático, al Estado moderno. Es un gobernante dotado de carisma y, al mismo tiempo, de prudencia y de sagacidad y es, sobre todo, quien pone los cimientos de la monarquía católica española y, en consecuencia, y como usted dice, del Estado moderno español. Es una figura que excede toda la historia de España. Realmente no ha habido ningún gobernante español de la talla de Fernando el Católico.
- ¿Cuáles fueron sus virtudes?
-Hubo muchas circunstancias, no sólo su personalidad, también el casamiento feliz con Isabel de Castilla. También tuvo mucha fortuna en varios escenarios, por ejemplo, en la guerra de Italia. La virtud mayor fue su gran carisma personal: fue un hombre sabio, prudente y, como le dije antes, sagaz. Algunos dicen que astuto, pero fundamentalmente sagaz. Y también un poco genial.
- ¿Por qué inspiró a Maquiavelo?
-Precisamente, por todo esto que venimos hablando. Lo ve como el príncipe nuevo, el hombre que por su inteligencia y su resolución es capaz de fundar de nueva planta un reino entero. Es verdad que lo había heredado, pero no actúa como heredero, si no como refundador del nuevo Estado: la España moderna, la unión de los reinos medievales.
- Maquiavelo es el fundador de la ciencia política.
-En principio sí, ve la política fundada en las reglas prácticas, en la experiencia, en los ejemplos. Trata de verla como un hecho autónomo ajeno a la religión y a la ética.
- Tras Fernando el Católico desapareció el Estado de Aragón. ¿Eso supuso algo?
-No, no. La casa de Aragón ya estaba emparentada con los Trastamara de Castilla y, en consecuencia, el enlace era muy esperado. Ganar la guerra civil y la de Granada le ennoblece y le convierte en un gran hombre de Estado.
- Su Quinto Centenario, en 2016, fue como una sombra.
-La política de hoy es muy ramplona e inculta y, además, está falta de carisma e inteligencia. Si hay alguna figura que reivindicar es Fernando el Católico. Le recuerdo que Felipe II paseaba por El Escorial con un embajador y se detuvo ante un retrato del monarca. Le dijo: "Con éste empezó todo". Incluso la Leyenda Negra.
- ¿Le ocultan los catalanes?
-Ya su padre hablaba de levantiscos catalanes, los que causaron problemas primero a Aragón y ahora a Castilla.
