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Debate sobre el emplazamiento del albergue de animales

Piden investigar si la finca destinada a la perrera en La Lloba tiene una fosa común

Balbuena garantiza que se revisará la existencia de restos de la Guerra Civil, aunque afirma que lo prioritario es poner en marcha el consorcio

Asistentes a la reunión vecinal en Santiago del Monte. | MARA VILLAMUZA

Elisa Campo

Los vecinos de Santiago del Monte que se oponen a la instalación de un albergue de animales en La Lloba reclaman un estudio de la finca ofrecida por el gobierno castrillonense de IU porque advierten de que tiene una fosa común y trincheras de la Guerra Civil española. Los vecinos mantuvieron el viernes una tensa reunión con la alcaldesa, Yasmina Triguero; el portavoz de IU, José Luis Garrido y concejales de los grupos de la oposición municipal: el PP, el PSOE y Castrillón Sí Puede. El concejal socialista avilesino Miguel Ángel García Balbuena, que coordina los trabajos del consorcio para el albergue, y que también asistió a la reunión, afirmó que se revisará si efectivamente existen restos de la Guerra Civil, aunque de mano eso no tiene por qué inhabilitar la parcela, ya que tiene 12.200 metros cuadrados y en función de dónde se encuentre la fosa podría ser compatible con el albergue.

En la reunión los vecinos dejaron patente su rechazo a la perrera en La Lloba y sus quejas por la finca elegida "que acoge una fosa común y está documentado por un estudio encargado por IU". "No se puede hacer un festival de música en el Pinar de Salinas porque hay una fosa común y sin embargo sí una perrera en La fosa común de La Lloba", se quejan los vecinos. El estudio "La Memoria Histórica en el concejo de Castrillón" encargado por el Ayuntamiento de Castrillón hace algo menos de una década a los historiadores Pablo Martínez Corral y Azucena López concluye que en el municipio existen dos grandes fosas comunes, una en Salinas y otra en La Lloba, y otras de menores dimensiones. La fosa de La Lloba, según el estudio, tiene su origen en una trinchera excavada durante el verano de 1937 para frenar un posible ataque de las tropas de Franco desde el sector de Pravia. A mediados de noviembre de ese mismo año, un mes después de que las tropas franquistas entraran en Castrillón, la trinchera comenzó a ser utilizada como fosa común.

Los testimonios recogidos por los historiadores en Santiago del Monte y entre familiares de desaparecidos indican que la fosa guarda numerosos cadáveres, según los autores del estudio. Asimismo, en el año 2003 la Asociación de la Memoria Histórica Asturiana promovió la conservación de la fosa de La Lloba y logró preservarla de las obras de la Autovía del Cantábrico, iniciativa que contó entonces con el apoyo del Ministerio de Fomento.

Pese a este posible inconveniente de la parcela, Balbuena afirmó que ahora lo prioritario es que los ayuntamientos que van a formar el consorcio ratifiquen el convenio en sus respectivos plenos, y sólo después será el momento de elegir la finca definitiva. "Esta es, de momento, la que mejores condiciones reúne, pero puede haber otras viables".

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