La inclusión de las educadoras de las escuelas infantiles de bebés en la relación de puestos de trabajo del Ayuntamiento de Avilés supondría para las arcas municipales unos 150.000 euros más al año: alrededor de 5.000 euros más de salario para cada una de las trabajadoras al estar equiparadas a la categoría C1. Ésas son las cifras que manejan el gobierno y la oposición y que salieron a relucir en el Pleno celebrado el pasado jueves.
El PSOE no consiguió frenar la pretensión de la mayoría de grupos de la oposición de crear el puesto de técnico de educación infantil pese a contar con informes técnicos que lo desaconsejan. Intentó hasta el último momento llegar a un acuerdo con el PP, que no fue posible.
La alcaldesa, Mariví Monteserín, pidió a los populares que votaran con ellos a favor de rechazar la incorporación de las trabajadoras a la plantilla estructural del Ayuntamiento. A cambio, se comprometía a impulsar desde el Pleno "un incremento salarial de las educadoras". Según pudo saber este periódico, la junta local del PP rechazó esa propuesta del PSOE -hubo voces discordantes que plantearon votar junto al gobierno- y mantener su abstención en la votación plenaria, lo que provocó que el PSOE perdiera la partida.
Fuentes del PP consideran "envenenada" la propuesta del PSOE, y más cuando en las próximas semanas se avecina la negociación de las ordenanzas fiscales. "No es el Pleno el que tiene que decidir un aumento de la retribución de esas trabajadoras, sino la mesa de negociación con los sindicatos", afirmaron.
