El PP y el PSOE asturianos cerraron ayer filas con la Constitución y dejaron meridianamente claro que no es momento de hacer reformas, con el problema del independentismo catalán sobre la mesa. O, como dijo San Ignacio, a quien ayer citó el diputado del PP José Ramón García Cañal, "en tiempos de tribulación, no hacer mudanza". Con matices, pero los representantes de los dos grandes partidos que asistieron ayer en La Granda a un debate sobre las perspectivas de la Constitución Española coincidieron en lo fundamental del mensaje. "Es un momento difícil y el PSOE tiene que, sin ambages, estar con la ley, con la Constitución", afirmó el portavoz del grupo parlamentario socialista en la Junta General del Principado, Marcelino Marcos Líndez.

El representante de Ciudadanos, el diputado y vicepresidente del Congreso de los Diputados Ignacio Prendes, fue el único de la terna que defendió una postura contraria. Y es que, en opinión de Ciudadanos, sí es momento de acometer las reformas. Al debate estaba también invitado un representante de Podemos, pero finalmente la formación morada declinó asistir.

El popular García Cañal argumentó las razones por las que no considera oportuno acometer ahora una reforma. "No confluyen las mejores condiciones por el problema que tenemos con el separatismo catalán. Además, el PSOE no tiene unidad de criterio sobre la modificación del modelo constitucional", explicó. Y por otra parte, en su opinión la reforma "no es una demanda de la sociedad, nadie por la calle me lo plantea". En cambio sí reconoce como demandas sociales "la situación económica y la corrupción que ha habido en los partidos políticos que ha creado una desafección". Por último, la mayoría de los intervinientes en La Granda, expertos todos ellos en Derecho Constitucional, consideran que no es el momento.

Por su parte, el socialista Marcelino Marcos Líndez comenzó también refiriéndose al problema catalán. "Algunas fuerzas políticas independentistas y algunas otras, dada su tibieza, son corresponsables de esos pasos que se han dado en Cataluña, y en esta situación el PSOE tiene que estar en su sitio", zanjó. Además, el diputado regional no ve claro conceptos como el plurinacionalismo. "Pedro Sánchez puede hablar de lo que quiera, pero a mí no me gusta ese concepto. Por encima de todo hay que estar con la Carta Magna". Y toda vez que la Constitución es hija de un consenso previo, es necesaria esa misma sintonía política y social para afrontar la reforma. "Si hay voluntad podríamos llegar a bastantes más acuerdos de los aparentes, pero con mucha prudencia y en el momento oportuno".

Finalmente, el diputado Ignacio Prendes explicó las claves con las que Ciudadanos defiende hacer la reforma constitucional: "Tenemos que construir consenso, evidentemente, pero también es evidente la necesidad de reformarla, siempre que se respete su esencia y el principio de que la Constitución es de todos y de nadie". Ciudadanos, destacó, es "el único partido que ha puesto sobre la mesa los puntos concretos de reforma que hay que abordar". Eso sí, Prendes dejó claro que este trabajo es totalmente al margen del problema catalán. "La reforma no se puede usar para contentar a los separatistas de Cataluña, eso es un error mayúsculo, si algo no hay que reformar es el capítulo 2 de la Constitución, que recoge el principio de unidad y la diversidad y autonomía de las regiones". Por último, destacó que Ciudadanos es el único partido que ha firmado acuerdos políticos con el PP y PSOE y que tiene un papel fundamental en encontrar espacios de consenso.