Una bandeja de bollos preñaos desaparecida, una fabada sin caldo, cachopos a medio hacer y casadielles asimétricas. La prueba de exteriores del capítulo "Masterchef Celebrity" de ayer tomó por escenario la explanada del Niemeyer. Los concursantes cocinaron para 70 comensales de la zona y, en pantalla, salieron caras muy conocidas en la villa, como la del concejal Manuel Campa; Francisco Fernández, presidente del Club de Empresas de Avilés o Manuel Fernández, presidente de la asociación vecinal del Carbayedo, que aportó el toque de humor de la noche al dar una lección exprés de escanciado de sidra a las artistas Anabel Alonso y Silvia Abril.

Después de la primera prueba del programa, que se saldó con los platos de Patricia Montero y el catalán afincado en Asturias Saúl Craviotto como los mejores, se dio paso a la prueba de exteriores, que tuvo como escenario la explanada e inmediaciones del Niemeyer. Los dos grupos capitaneados por Montero y Craviotto se dividieron el trabajo para elaborar un menú asturiano de bollo preñao, fabada, cachopo y casadielles.

Mientras trabajaban, en pantalla salieron decenas de planos con vistas avilesinas, algunas de ellas grabadas a vista de pájaro y a gran altura. Los platos resultantes, no obstante, no fueron tan sorprendentes. Primero, el grupo de Montero se olvidó una de las bandejas con bollos preñaos en el horno, por lo que varios comensales no pudieron probarlos. De nada sirvió la esperanza de la presentadora Eva González, que deseó un "bon provechu" a los catadores. Los bollos resultaron estar quemados por fuera y crudos por dentro. "Esto no hay Dios quien lo coma", aseguraron los comensales más sinceros.

Partiendo de la premisa de que elaborar una buena fabada en 90 minutos es una ardua tarea, las cacerolas del grupo de Craviotto tampoco estuvieron a la altura. "Estoy muy nervioso porque juego en casa", explicó el concursante. La poca cocción del plato tradicional se debió, según el jurado del programa, a que los concursante destapaban cada pocos minutos las ollas y, al ver que el caldo se evaporaba, añadían agua fría.

Los cachopos del grupo de Montero fueron "desastrosos", según el jurado. José Corbacho perdió los nervios a la hora de cortar la carne y su capitana los perdería también más tarde, al ver que el rebozado se desprendía y que la carne de ternera quedaba completamente cruda por dentro. Los comensales lamentaron que los cocineros hubiesen echado a perder una carne "de muy buena calidad".

El postre empezó mal desde el principio. El grupo de Craviotto necesitó de varios intentos para conseguir cuajar la masa de las casadielles. Después, en plena elaboración, se dieron cuenta de que su materia prima no alcanzaba para dar de comer a 70 personas, por lo que, sobre la marcha, redujeron el tamaños de cada porción. Algunas quedaron también más doradas que otras.

El jurado se mostró muy duro con los concursantes y decidió enviarlos a todos a la fase de eliminación. "Ninguno habéis estado a la altura", lamentaron. Finalmente, la expulsada fue Bibiana Fernández, que llegó a discutir con Jordi Cruz por su "injusta" valoración. Se rompe así la considerada por muchos la pareja más graciosa del programa, la de Fernández con la actriz Anabel Alonso, que se mostró ayer visiblemente emocionada.