José María Gil-Robles, ya octogenario, abandera la causa europeísta con la misma pasión que cuando ejercía la política de forma activa. Expresidente del Parlamento Europeo entre 1997 y 1999 y eurodiputado durante 15 años ininterrumpidos, el abogado madrileño que militó en las filas del PP analizó ayer en Avilés la actualidad europea.

"Es cierto que el 'Brexit' supone un paso atrás en el proceso de la construcción europea, pero solo porque un país miembro se ha ido y eso es algo que nunca antes había ocurrido. En mi opinión, la marcha del Reino Unido es sana para Europa. Me explico: los británicos siempre fueron reticentes a la idea europea y esa actitud llevó a Europa por caminos débiles. Al final, han acabado haciendo lo que procede cuando no estás a gusto en un sitio: irse. Abierto el melón del abandono del proyecto común europeo, los demás países han reflexionado y se han quedado, ninguno más se ha ido, lo cual ahora nos hace más fuertes. El 'Brexit' será malo para todos, cierto, pero más para los británicos; han cometido un error monumental y con el tiempo se acabarán dando cuenta".

Respecto a los escollos que debe sortear Europa para no naufragar, Gil-Robles señala inequívocamente a la financiación: "Europa anda corta de dinero y lejos de arreglarse el tema, han entrado más países a la vez que encogían las aportaciones. Así vamos mal".