Julio Martínez Zahonero, el juez de Violencia de Género local, aseguró ayer en el Centro Niemeyer que ha percibido "un aumento de las denuncias por temas de agresión o abuso sexual" en Avilés. Pese a esto, descartó que este incremento se deba a que la violencia contra las mujeres haya crecido más que otros años. "Igual, simplemente, tiene más visibilidad. Ya pasó en su día con la violencia de género: aumentaron más las denuncias. ¿Quiere decir que había más? Las mujeres han dado un paso adelante que antes no daban", destacó el magistrado titular del Número 5 de Avilés y, asimismo, delegado de Jueces y Juezas Para la Democracia (JJpD) en Asturias. Esta asociación de magistrados ha organizado en el complejo cultural de la ría las V Jornadas de la Comisión Privada de JJpD.

La percepción de Zahonero tiene reflejo, a su vez, en los datos oficiales ofrecidos hace pocas semanas por la Comisión Técnica para la Coordinación de Actuaciones y el Seguimiento de la Violencia de Género. Según estos datos, en Avilés hay 110 mujeres con vigilancia policial, 103 de ellas con órdenes o medidas de protección judicial y siete tienen vigilancia, pero están a la espera de sentencia. Se trata de la cifra más alta del último lustro. De estas mujeres maltratadas, una tiene riesgo extremo. Otras 14 tienen riesgo medio y el resto, bajo o no apreciado. Además, la Policía Nacional realiza el seguimiento de 46 mujeres y la Policía Local, de 64.

"Normalmente, cuando los abusos y agresiones sexuales saltan a la prensa es porque tienen su reflejo en los juzgados", reconoció Zahonero a los periodistas. ¿La represión penal es la única herramienta para acabar con los agresores y violadores? "No vamos a acabar con la violencia de género sólo con la represión penal, que es necesaria, si no también con medidas culturales y educativas. La lucha contra estos delitos a través de la educación es fundamental", apuntó el magistrado moscón.

Sin embargo, las condiciones de trabajo de los jueces especializados no son las óptimas: "Considero que es muy relevante que la administración haga algún tipo de movimiento en el tema de los equipos psicosociales. Es muy importante para el juez tener un informe de peritos, de trabajadores sociales y psicólogos. Ahora mismo se está produciendo un retraso por saturación de estos servicios que en Avilés pasa del año. En otros partidos judiciales llega incluso a dos años. Creo que aquí la Administración debería hacer un esfuerzo para dotar mejor estos servicios para reducir el tiempo de espera en materia de familia", apuntó el magistrado. Al hilo de esto admitió: "Todos los juzgados en Asturias han visto aumentar el trabajo este año, sobre todo, en los juzgado mixtos, como el mío, donde llevamos asuntos penales y civiles. Ha habido un aumento de la litigiosidad civil muy elevada que ha sobrecargado la tarea de los juzgados", concluyó el delegado Jueces y Juezas para la Democracia.