Las ramas y el tronco de un árbol talado hace semanas en la avenida de Lugo, a la altura de la Fundición (Avilés), tras el temporal de fuertes vientos que azotó la ciudad permanecen desde entonces en la acera obstruyendo el paso. Los peatones se ven obligados a transitar por la calzada -como muestra la imagen- con el consiguiente peligro ya que se trata de una zona de tráfico abundante y escasa iluminación por la noche.