Los integrantes de la comisión del agua en Avilés votarán las conclusiones de la investigación el próximo 23 de abril. Los grupos municipales tendrán hasta el día 19 de plazo para presentar por registros sus impresiones de las diferentes reuniones celebradas. En ese sentido, esta mañana se celebró la última sesión de comparecencias, a la que sólo acudió un trabajador municipal que no pudo asistir la semana pasada por estar de vacaciones. A la cita estaban también convocados trabajadores de Aquagest, el socio privado del Ayuntamiento de Avilés en la empresa mixta Aguas de Avilés, pero estos no acudieron, lo que provocó las críticas de alguno de los grupos de la oposición.

La pasada semana se celebraron el resto de comparecencias, a las que no acudió la mayoría de políticos invitados. Fue el caso de Miguel Ángel y Elena Villalba, exconcejales de ASIA en el momento en que se acordó cambiar el modelo de gestión, así como Carmen Vega, exedil del PP por entonces y mujer de Joaquín Aréstegui, expresidente del PP de Avilés, también convocado. Todos ellos están investigados en dos de las tramas judiciales del agua. La comisión también había llamado a la presidenta del PP de Asturias, Mercedes Fernández, y su hermano, que trabajó para Aquagest.

Los únicos políticos que acudieron fueron la exalcaldesa de Avilés, Pilar Varela, y los dos concejales que aún siguen en el Ayuntamiento y que formaban parte de la Corporación que aprobó el cambio de gestión del servicio del agua en Avilés Luis Ramón Fernández Huerga, portavoz del PSOE, y Constantino Álvarez, exedil del PP y ahora tránsfuga. La exalcaldesa defendió en todo momento que el proceso de privatización había sido "impecable" y negó la existencia de trama alguna de corrupción.

Los miembros de la comisión también llamaron a algunos técnicos municipales, que negaron injerencias políticas en el contrato del servicio. El jefe de Obras, Basilio Jerónimo de Paz; la directora de los Servicios Jurídicos, Reyes Suárez; y la arquitecta Gemma Miranda respondieron a las preguntas de los concejales y en su testimonio no hubo nada diferente a lo que ya trascendió en su día en la comisión informativa. La sesión se prolongó durante cuatro horas y, salvo Somos e IU, que observaron contradicciones en los testimonios en algunos aspectos, el resto de grupos no ve por el momento indicio alguno de irregularidades.