"La materia prima de la música es lo que uno siente y el reto, encontrar la empatía para trasladarlo con el público". Así comenzó el guitarrista, compositor y productor musical David Feito su charla en el hall del Conservatorio de Avilés con motivo de la II Semana cultural del Julián Orbón. Feito, exmiembro de "El Sueño de Morfeo", centra buena parte de su tiempo en componer piezas para artistas como Álex Ubago, Amaia Montero y Paul Alone e intérpretes de "Operación Triunfo", entre otros.
"Como soy más músico que letrista, pongo más esfuerzo en las letras", revela el autor, que tiene en mente la publicación de un libro-disco para finales de año que supondrá su segundo trabajo en solitario. "Si algo es común a los compositores y artistas desde Mozart a Daddy Yankee es la melodía", afirmó el artista ovetense momentos antes del comienzo de la conferencia.
David Feito es ovetense y comenzó a estudiar música en el conservatorio de su ciudad a los 18 años. Previamente, en su adolescencia ya había comenzado a hacer pinitos con la guitarra. "Soñar es gratis, es lo más sano del mundo; mi sueño era ser piloto y lo conseguí, lo mismo que ocurrió con la música ", señaló el artista, que considera que "Despacito", el tema que revolucionó el verano pasado las listas musicales, "es arte pese a que muchos lo critiquen" por su aparente simpleza.
En su faceta de compositor, la mayoría de los encargos que Feito recibe en los últimos años son en un 80 por ciento de música latina, es decir, principalmente reggaetón. "Vengo de otras músicas como el pop o el indie; sin embargo ahora la demanda es esa: la música latina", señaló.
Durante la conferencia, David Feito se dirigió a los alumnos asistentes y les comentó que "todos los músicos tienen un don, y ese don les permite tocar más y mejor cada vez". Los pequeños músicos atendían cada una de las palabras del músico, que para componer juega en un folio blanco con palabras clave que posteriormente combina para generar canciones. "Suelo hacer un mapa sinóptico y relaciono las palabras para escribir", detalló el músico, que considera que para cualquiera de sus composiciones la clave es ponerse del lado del público para que "conecte" con lo que él siente a la hora de componer.
Sobre las corrientes musicales más populares de los últimos tiempos, en los que predomina el reggaeton, hacer una canción sin un estribillo antes de los primeros treinta segundos sería entendido casi como "un sacrilegio".
