Tarde de cine en el Hospital Universitario San Agustín. En pantalla, la película "Donkeyote", una historia entrañable y divertida (narra la peripecia de Manolo, un hombre de 73 años que quiere hacer una larga ruta por Estados Unidos en compañía de su burro "Gorrión") capaz de generar un sonrisa en los espectadores. Y en las butacas, un público atípico: pacientes hospitalizados y acompañantes de los mismos. Unos llegaron a la improvisada sala de proyección en sillas de ruedas y casi todos expectantes ante la novedad de disfrutar de una tarde diferente: sesión de cine sin salir del hospital.
El gerente del área sanitaria, Enrique González, aplaudió la ocurrencia de los responsables del Avilés Accion Film Festival de llevar el cine a donde nadie se lo espera y haciendo suyas las opiniones de los expertos médicos en estados de ánimo destacó que una buena película "puede tener efectos terapéuticos positivos". Cuando menos, añadió, ayuda a combatir las horas de tedio. Eso sí, desaconsejó la programación de ciertos géneros, como el drama.
El director del festival de cine avilesino, que este año cumple 17 ediciones, Javier Mediavilla, recalcó que "la búsqueda de las facetas humanas" es una constante en la organización del festival y añadió que "en un ámbito como el hospitalario hay abundancia de ese factor humano". Por esa razón, explicó, se ha programado la proyección de un película en el hospital, una experiencia que tendrá continuidad mañana, miércoles, a las 17.30 horas en el centro de personas mayores de Las Meanas.
La concejala de Cultura, Yolanda Alonso, insistió en la idea de "descentralizar la oferta cultural para que llegue a todos los rincones de la ciudad" y en ese sentido agradeció la buena acogida que tuvo entre los responsables sanitarios la idea de proyectar una película en el hospital.
