El Colectivo Ecologista de Avilés denunció ayer el enésimo pico de contaminación en la ciudad, con un incremento del 931 por ciento del benceno "procedente de las viejas baterías, y eso que llovía", según explicó el portavoz de la plataforma, Fructuoso Pontigo. Se detectó el miércoles en la estación de Llaranes, la única que da datos en continuo del benceno, y pasó de 2,32 microgramos por metro cúbico a un valor de 23,92 a las 14.00 horas.