"Ya se acabaron los vertidos de La Mofosa", señaló ayer el alcalde de Gozón, Jorge Suárez (PSOE), tras el fin de la obra de conexión de la red de saneamiento de Peroño. "Recepcionaremos el fin de la obra la próxima semana", añadió el Regidor. Esa actuación no solo permitirá la eliminación de los vertidos a las aguas de Luanco y poner fin a un problema de años sino que también supondrá un alivio para las delicadas cuentas del Ayuntamiento. Esa obra tuvo un desembolso municipal que rondó los 360.000 euros.

Los trabajos consistieron en conectar el saneamiento de La Mofosa con la red general y comenzó a sufragarse en 2016. "Cuando entré de Alcalde me encontré con que habían sancionado al Ayuntamiento y todo ello después de haber advertencias de posibles multas en 2014, pero no se hizo nada", señaló el Regidor gozoniego.

La nueva actuación dará servicio a un total de 140 viviendas que no disponían de la red de saneamiento y hasta la fecha evacuaban sus aguas residuales directamente al mar. La obra no solo no permitirá más vertidos indeseados al Cantábrico sino que también servirá para evitar más sanciones económicas que lastrarían aún más las arcas municipales.

Jorge Suárez fundamentó su renuncia a solicitar la bandera azul para la playa de Luanco dados los vertidos contaminantes que se producían periódicamente en el entorno de Peroño. Por el momento, no ha desvelado si la solicitará en próximas ediciones. Por lo pronto, el próximo verano la enseña que entrega Adeac cada año y que premia la calidad ambiental de los arenales y de sus aguas no lucirá en la playa de Luanco.

Además, el Alcalde explicó que el Ayuntamiento ha habilitado una plataforma en los terrenos de La Mofosa, donde cada verano se desarrolla el concurso hípico de Luanco, para colocar unos servicios públicos "de temporada y similares a los que se colocan cada verano en la playa de Bañugues". "También habrá un baño habilitado para discapacitados físicos", añadió el regidor, que ha celebrado que el próximo verano, que llegará en un par de semanas, será el primero sin vertidos al mar Cantábrico en las aguas más próximas a la capital del concejo de Gozón.