El mercante de bandera rusa "Severnaya Zemlya", de 181 metros de eslora, se halla atracado en el puerto de Avilés desde el pasado día 18 de mayo, fecha de su llegada a la ría, impedido por causas económicas para hacerse a la mar. El barco llegó cargado con 15.000 toneladas de carbón que descargó con normalidad en la explanada del muelle de Raíces, pero en esos días fue notificada a la Capitanía Marítima de Avilés una orden de embargo relacionada con deudas pendientes de la empresa armadora, Murmansk Sg Co. El origen de esa deuda no ha trascendido, pero fuentes del sector descartan que tenga que ver con empresas locales. Tal situación impide tramitar el papeleo para zarpar, por lo que la tripulación, compuesta por una veintena de personas, se aprestó a esperar noticias del propietario del navío. Según fuentes portuarias consultadas por este diario, la resolución del caso podría producirse durante la próxima semana habida cuenta de que el armador ha iniciado gestiones para liberar el barco del embargo.

El paso de los días sin atisbo de solución para los problemas económicos y administrativos del "Severnaya Zemlya" obligó a la Autoridad Portuaria de Avilés a solicitar de su capitán un cambio del punto de atraque para no afectar a la operativa ordinaria de cargas y descargas en el muelle de Raíces, con más motivo cuando el buque en cuestión en un bulk-carrier de dimensiones notables. Fue entonces cuando el buque cruzó la ría y atracó en el muelle de Valliniello, una zona menos congestionada de tráfico marítimo. Allí sigue, acumulando días de estancia e inactividad.

Según un responsable de la empresa consignataria que inicialmente representaba los intereses del armador en Avilés, y que renunció a ese papel cuando las cosas se torcieron, los tripulantes del "Severnaya Zemlya" están en buen estado y tienen recursos para aprovisionarse de víveres y demás suministros y enseres necesarios para la vida a bordo. A diferencia de otros casos similares de barcos bloqueados en puertos por impagos de sus armadoras, la situación del "Severnaya Zemlya" es más alentadora: el buque es relativamente moderno (fue botado en 2009), presenta buen estado de conservación, no figura en las "listas negras" de las organizaciones marítimas internacionales y nada hace pensar, por sus antecedentes, que la empresa propietaria vaya a desentenderse del barco.

En la historia del puerto avilesino ocupan un lamentable lugar barcos como el "Orient Star", de bandera dominicana, que en 2008 atracó con nueve tripulantes a bordo y fue bloqueado dado que su estado destartalado era incompatible con la seguridad marítima. A diferencia de la armadora del "Severnaya Zemlya", la del "Orient Star" se desentendió en principio del tema y pasaron meses hasta que los marineros hallaron una salida a su abandono. Y dos años antes, en 2006, otro armador dejó en la estacada a los tripulantes del "Greenland", que había embarrancado en la barra que protege la bocana de la ría y cuyos costes de rescate le parecieron demasiado onerosos al la firma propietaria del navío.

Se da la circunstancia de que este mismo buque ruso había estado en fechas recientes en Avilés. En concreto atracó el 14 de enero para descargar 15.750 toneladas de briquetas de hierro, y lo hizo con plena normalidad, zarpando en cuanto acabó la maniobra con destino a nuevos puertos. La localidad donde el "Severnaya Zemlya" cargó el carbón que lo hizo volver a Avilés fue la ciudad letona de Riga; de momento ese ha sido su último transporte.