"Al final, todo esto compensa". Óliver Martín decidió hace un año dar un paso importante: iniciar su transición y empezar a vivir tal y como es, siendo un chico. Un camino no exento de miedos, incertidumbres, frustraciones... pero también de satisfacciones. Una auténtica "montaña rusa". "Muchas veces esas frustraciones durante la transición llegan por compararse con otros chicos trans y por las películas que te has montado en la cabeza. Pero en realidad, estoy mucho más cerca de lo que siempre he sido que de lo que me han hecho creer", aseguró ayer Martín, de 23 años. Lo hizo en el palacio de Valdecarzana, pero no en directo, sino a través de un resumen de los vídeos que publica desde hace un año en el canal por el que se ha dado a conocer al resto del mundo contando su historia -"You Tube"-. El joven fue uno de los participantes en la mesa redonda organizada dentro de los actos del I Orgullo de la diversidad sexual, junto con Ana Fernández, sexóloga y presidenta de AsturSex, y los participantes de DiverSex.

"Es importante visibilizar y ayudar a la gente que acaba de empezar a ser quien es. La transición comienza cuando te das a conocer; es como volver a nacer", comenta. Martín arrancó su andadura en "You Tube" antes de iniciar su transición y a la espera de ser llamado por la Unidad de Tratamiento de Identidad de Género del Principado de Asturias (UTIGPA). Un año después, ya está en tratamiento hormonal.

En uno de los vídeos, el "youtuber" reflexiona sobre los miedos: "Empiezas a pensar si merece la pena, si es un error... Tienes miedo al rechazo y a que no acepten tus familiares y tu entorno que es la forma de escapar para ser feliz. También tienes miedo a los cambios físicos, a si va a pasar algo en las operaciones, a que no se me vea como soy. Yo di el paso desde mi amor propio y me quité los miedos para ser feliz. Lo superé y decidí ser quien soy", afirma. Fue su abuela la última en saber que se llamaba Óliver, en enero de este mismo año: "Ya lo sabe toda mi familia, ya no me tengo que esconder de nadie más", afirma en su narración.

Martín utiliza su canal no sólo para explicar su transición sino también para intentar resolver dudas de otras personas que estén en su misma situación. Les recomienda, sobre todo, "tener calma" y a no querer hacer el cambio más rápido de lo aconsejado. Y, sobre todo, a tener paciencia con las personas: "Os digo que os llegan a entender. Y antes de lo que pensáis".

Ana Fernández, por su parte, habló en su intervención de los menores transexuales, el colegio y la familias y urgió a que se elabore un protocolo de actuaciones para que los docentes o los profesionales de la sexología puedan hablar con las familias de que un niño es en realidad una niña o al contrario. "La identidad es lo que tú eres, no lo que tienes entre las piernas", aseveró la sexóloga y profesora del IES de La Magdalena. Avanzó que este año habrá a disposición de los centros material didáctico elaborado por profesionales de la sexología en los que se acaba con los estereotipos y se visibiliza a los menores transexuales.

Por la mañana, el protagonismo fue para los integrantes de DiverSex, que fueron los encargados de colgar la bandera arcoíris en el balcón del Ayuntamiento. "Es un día para reivindicar quiénes somos como personas y a quien amamos", afirmó Álvaro Vázquez. Los retos del colectivo LGTBIQ son visibilizarse y, sobre todo, "luchar contra la homofobia, la transfobia y la LGTBfobia". Hoy, a las 19.00 horas, manifestación.