Una protectora de animales se hizo cargo ayer de un gato persa que apareció en el alféizar de una ventana del cuarto piso de un edificio de la calle Rey Pelayo de Piedras Blancas. Vecinos del inmueble denunciaron ayer por la mañana a la Policía Local de Castrillón la situación de peligro que corría el felino, que sale habitualmente, según residentes en el inmueble. "El gato suele colarse por las ventanas en otras viviendas del edificio en busca de comida", sostienen.

Agentes municipales acudieron a la llamada del vecindario, aunque el gato ya había regresado al interior de la vivienda. La dueña se lo entregó a los policías que consiguieron que la asociación "Corvera felina" se hiciera cargo del animal tras rechazar la dueña que el gato siguiera a su cargo. El animal tiene dañada una de las patas trasera. "El gato siempre andaba fuera de su domicilio. Entraba en los demás pisos en busca de comida y no estaba en buenas condiciones", señaló ayer un vecino del inmueble.

El rescate del gato persa en Piedras Blancas es la segunda intervención de este tipo de la Policía Local de Castrillón durante los últimos días. La semana pasada dos agentes rescataron a un gatito atropellado en Santiago del Monte tras el aviso de un ciclista.