Un eucalipto de grandes dimensiones se vino abajo a primera hora de la noche del viernes como consecuencia de las constantes lluvias que ha sufrido la comarca en los últimos días. El árbol cayó entre las localidades de Panizales y Sanzadornín, en la carretera AS-319, la que une La Magdalena con Villa.
El desprendimiento no causó daños personales, pero obligó a desviar el tráfico durante algunas horas, las que invirtieron los trabajadores de las brigadas de Carreteras y de la empresa proveedora de energía, dado que el árbol se fue a encontrar con un tendido eléctrico. Finalmente, se reestableció la normalidad en la zona ayer sábado por la mañana: las brigadas serraron el árbol y los empleados de la empresa de energía devolvieron la luz a los vecinos afectados.
