La playa de Salinas vivió ayer una imagen inédita. Varios agentes de la Policía Local accedieron al arenal por petición de los socorristas para obligar a numerosos surfistas a que dejaran de coger olas en la zona limitada sólo para baños. El equipo de Salvamento, desesperado, se vio obligado a llamar al Cuerpo municipal después de una hora de avisos por megafonía, a los que hicieron caso omiso los que estaban sobre sus tablas.

La playa de Salinas había colgado el cartel de completo desde primera hora de la mañana, en una jornada de mucho calor. A las 11.30, como todos los días, comenzó la vigilancia por parte de los socorristas. Pronto, empezaron a desgañitarse por los altavoces para que algunos surfistas abandonaran la zona de baños que se ubica a la altura de las escaleras número 9 y 10, casi al final del paseo marítimo, en la zona de El Espartal. Los avisos de los vigilantes no surtieron efecto y decidieron pedir el apoyo de la Policía Local. "Ondeaba la bandera amarilla, pero había pocas olas y gran parte de los surfistas coincidieron en la zona de baños. La marea estaba alta y había poco sitio en la playa para la gran cantidad de bañistas", explicó un testigo.

"Durante la temporada y horario de baño, en las zonas reservadas en exclusiva para el baño, queda prohibida la práctica de la actividad deportiva de surf, windsurf, kitesurf y otras disciplinas similares", dice la ordenanza de uso y aprovechamiento de las playas de Castrillón. Y añade: "El personal de salvamento apoyará a los agentes de la autoridad en la labor de información, comunicando las infracciones de la ordenanza". La Policía puede sancionar a las personas que desoigan a los socorristas. La práctica del surf en zona de baños está considerada una infracción grave y las sanciones establecidas oscilan entre los 151 y los 600 euros. No obstante, pueden incrementarse en caso de reincidencia. Ayer, los agentes informaron a los surfistas de que debían abandonar as zonas de baños, pero no impusieron multas.

Por otra parte, usuarios del paseo marítimo se quejaron de que hay muchas personas que utilizan patinetes molestando al resto de los paseantes. La asociación de vecinos "Amigos de Salinas" ha pedido en varias ocasiones que se repongan los carteles que informan a los viandantes de la prohibición de utilizar patinetes, bicis o de que los perros vayan sueltos por el paseo marítimo. Auxiliares de Policía local vigilan diariamente la zona.