El proyecto de reforma del parque del Muelle presentado el lunes pasa con buena nota el examen del vecindario y supera también el filtro de los partidos de la oposición. En líneas generales, la intervención anunciada por el gobierno local ha gustado a la ciudadanía, con la salvedad de que la pérdida de plazas de aparcamiento preocupa en ciertos ámbitos, como por ejemplo el comercial. Desde medios políticos instan al PSOE a "afinar con cuidado" las propuestas esbozadas para no cometer errores en la ejecución de las obras y a ir pensando tanto en cómo compensar las plazas de aparcamiento que se perderán como en la organización de actividades culturales que potencien el futuro uso de la zona verde.

La alcaldesa, Mariví Monteserín, cogió de inmediato el toro por los cuernos: "Paliaremos la reducción de aparcamientos asociada a esta peatonalización habilitando nuevas plazas en la parte colindante del parque y en otras zonas de la ciudad". La Regidora también defendió que no es la primera vez que una peatonalización levanta polémica en Avilés: "Se trata de conciliar todos los intereses, los peatonales, los de disfrute del parque y los de los automovilistas. El mayor impacto de reducción de aparcamientos se produjo con la peatonalización del centro y ahora todos convivimos muy bien, por lo que este nuevo efecto lo podremos amortiguar perfectamente".

El portavoz de Somos Avilés, David Salcines, apoyó la remodelación del parque del Muelle. Sin embargo, señaló que "solo se podrá recuperar de verdad si al plan urbanístico se le dota de actividad. Debemos hacer del parque un espacio lleno de vida cultural. Y es que el Ayuntamiento no tiene un proyecto de ciudad, sino proyectos zonales. Lo que hay que desarrollar es el potencial de todos los elementos, no pensar en cada pieza del puzzle".

El términos parecidos se pronunció Llarina González, la portavoz de IU: "La idea tiene buena pinta, pero queda mucho trabajo por delante. Sólo con las obras no se conseguirá la pretendida revitalización del área, es necesario potenciar el uso del quiosco de la música y el desarrollo de un plan de actividades culturales, por no hablar de la asignatura pendiente de las vías del tren".

Carlos de la Torre, portavoz del PP, atribuyó a su partido el mérito de que el proyecto de reforma del parque del Muelle haya visto la luz "aunque con bastante retraso" pues los populares impusieron como condición para aprobar el plan especial del casco histórico la intervención urbanística en la zona verde. Con respecto a la solución técnica elegida, aceptada de buen grado por los populares, De la Torre señala como "problemática" la pérdida de aparcamientos, avisa de que el edificio a construir para instalar una cafetería "no debe desentonar" con el conjunto y anticipa mucha tarea de "trazo fino" para lograr un buen acabado del proyecto.

La edil de Ciudadanos, Carmen Pérez Soberón, indicó que le gusta lo que se plantea para el parque del Muelle; eso sí, "a sabiendas de que es casi imposible hacerlo a gusto de todos". Sobre el tema del aparcamiento, opina que "nos influirá como conductores, pero la tendencia es hacer ciudades amables y sacar el tráfico del centro. Habrá que procurar nuevas aparcamientos disuasorios y en ese sentido desde Ciudadanos insistimos en la apertura del parking del Niemeyer".

Agustín Sánchez, de Ganemos, puso énfasis en la idea de que se respeten los árboles "y que no se dejen los espacios diáfanos llenos de cemento". También añadió que "los cambios de dirección de tráfico deberían ser posteriores a la elaboración del plan local de movilidad, nunca antes".

La asociación de vecinos Pedro Menéndez, muy significada durante los últimos años en la petición de reforma del parque del Muelle, opinó por boca de Pablo González: "El proyecto está bien porque se respeta el parque y peatonalizar la plaza de Pedro Menéndez es un acierto. El único problema es la falta de participación ciudadana, no se ha dado oportunidad a la gente de debatir cómo quiere que sea su parque. No solo se debería haber consultado a técnicos arquitectónicos en los proyectos, sino también a sociólogos y biólogos que propusieran ideas".

En nombre de los tres concejales tránsfugas, Constantino Álvarez valoró la idea de fusionar lo mejor de las propuestas técnicas finalistas en el concurso de ideas convocado para la reforma del parque y juzgó como "muy positiva" la creación de un gran eje peatonal desde El Muelle a Las Meanas gracias a la peatonalización de la plaza de Pedro Menéndez. El único reparo, la pérdida de plazas de aparcamiento: "Hay que compensarlas de algún modo".

Ya en la calle, ayer también hablaron los vecinos; de hecho, la reforma del parque del Muelle fue uno de los temas más comentado del día en los corrillos callejeros y las tertulias de bar. Los vecinos no parecen tener dudas sobre los beneficios asociados a la reforma integral del parque, aunque algunos, como Ceferino Iglesias, no se quiere "mojar" hasta ver las obras acabadas: "A priori el proyecto de reforma está bien, pero cuando esté listo habrá que ver lo que de verdad es". José María Clemente apunta que el parque conoció tiempos mejores que el presente y solo por eso apoya la idea de "remodelarlo siempre que sea para mejorarlo".

"La reforma del parque del Muelle es algo que se lleva pidiendo hace mucho tiempo. Lo que no sé muy bien es cómo van a hacer con las plazas de aparcamiento", destacó María Dolores Ibáñez, hostelera de la zona. Una preocupación que respalda el pescadero Luis Francisco Álvarez: "Es bueno que remodelen el parque; el problema vendrá con las plazas de aparcamiento porque no sé dónde vamos a dejar el coche". A Mila Vega, vecina de la zona, le preocupa la conservación de la masa arbórea: "Veo bien que se reforme el parque siempre y cuando se mantenga toda la arboleda".

Una de las claves de la reforma del parque es la supresión de uno de los carriles de circulación de la calle La Muralla y de la línea de aparcamientos existente en el margen colindante con el parque. Se prevé que la actual parada de taxis de la plaza de Pedro Menéndez -próximamente zona peatonal- se traslade a la calle de La Muralla, algo que en opinión del taxista Marcos Díaz "no afectará mucho a los trabajadores de esta parada". Según este taxista, "en principio todo lo que sea bueno para la ciudad es bienvenido. A los taxistas no creo que nos cree inconveniente alguno".