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El Niemeyer, falto de personal para vigilar sus dos parkings, da prioridad al de pago

Los usuarios se quejan por ser derivados al aparcamiento subterráneo una vez se cierra el gratuito por completo y aunque luego queden plazas libres

Coches en el aparcamiento exterior gratuito del Niemeyer MARA VILLAMUZA

Aparcar en el Centro Niemeyer sigue en el centro del debate social y político y continúa acumulando quejas de los ciudadanos que acuden estos días a la exposición de Joaquín Sorolla que se exhibe en el edificio de la cúpula. Las últimas protestas están centradas en la organización de los dos aparcamientos que existen en la parte trasera del complejo, uno exterior gratuito y otro subterráneo y de pago en el que dejar el coche cuesta dos euros, independientemente del tiempo de estancia. Según relatan unos usuarios, cuando se disponían a acceder al parking exterior del que en ese momento salía otro vehículo, un vigilante les indicó que debían acudir al subterráneo porque el de superficie estaba cerrado. Ante la sorpresa de los ciudadanos, "ya que habíamos visto un coche abandonar el lugar", el guarda aclaró que "una vez que se llenaba el gratuito ya no se permitía aparcar en él aunque posteriormente quedaran plazas libres", manifiestan.

En un afán de conocer los motivos de tal normativa, que obliga a los conductores a abonar dos euros cuando no siempre sería necesario, "nos dijeron que no había personal suficiente para controlar los dos aparcamientos y, por tanto, que quedaba cerrado el de superficie una vez se completa", añaden los ciudadanos que, por su parte, debieron entregar el recibo del parking a la salida al vigilante "para justificar la estancia", según las explicaciones que recibieron.

La titularidad de dicho aparcamiento, que tras varios años de espera entró en servicio en abril de 2016, corresponde a la sociedad estatal Sepides, gestora del Parque Empresarial Principado de Asturias (Pepa). Esta entidad cedió a la Fundación Niemeyer el establecimiento para su gestión y explotación, como queda reflejado en el recibo que el Centro Niemeyer entrega a los usuarios.

En aras de solucionar los problemas que se suceden en torno al aparcamiento del Niemeyer, los responsables del Ayuntamiento esperan la designación, por parte del Gobierno, de un nuevo interlocutor en Sepides al objeto de poder alcanzar un acuerdo sobre la explotación de dicho espacio.

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