La Fiscalía ha elevado de 14 a 16 años la pena de cárcel que solicita para el avilesino de 59 años acusado de abusos sexuales a una menor a cambio de droga y dinero una vez celebrado el juicio, esta mañana, en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Asturias. La sesión se ha celebrado a puerta cerrada. El Ministerio Público ha modificado sus conclusiones y ha elevado de dos a cuatro años la pena que pide para el imputado por un presunto delito de tráfico de drogas, han comunicado fuentes próximas al caso.

La acusación pública pide así para J. A. C. A. una pena de 12 años de cárcel, una orden de alejamiento y de comunicación con la menor durante quince años y ocho de libertad vigilada por un presunto delito de abuso sexual. Además, solicita cuatro años de cárcel más por un delito contra la salud pública. La defensa ha mantenido que el acusado es inocente y pide la libre absolución.

Las acusaciones (está personada la asociación Cavasym como acusación particular) mantienen que el hombre entabló una relación con la pequeña, a la que invitó en numerosas ocasiones a su casa de Avilés, situada en las proximidades del instituto en el que estudiaba ella, entre noviembre y diciembre de 2016. En esos momentos, J. A. C. A. aprovechaba para tocar los pechos y los genitales a la adolescente e incluso, siempre según la fiscalía, "la convenció hasta en siete u ocho ocasiones para que le realizara una felación". La menor recibía a cambio dinero y pequeñas cantidades de hachís.

El caso trascendió por una investigación que se abrió en el propio centro donde estudiaba la menor, como adelantó LA NUEVA ESPAÑA. Su madre acudió al instituto en busca de explicaciones tras encontrarse un día la mochila de su hija llena de piedras y heces, según explicaron fuentes próximas al caso a este periódico hace unos meses. El instituto, ante lo sucedido, comenzó las indagaciones y detectó que la chica "piraba clase prácticamente todos los días y se relacionaba con un grupo no recomendable". En ese mismo contexto, trascendió que la adolescente acudía al domicilio del ahora acusado y que salía de su casa con dinero que luego repartía entre sus amigos.

En el registro del domicilio del acusado realizado en enero del 2017 se encontraron unos siete gramos de hachís valorados en 13,66 euros, según las acusaciones.