La Cofradía de la Virgen de los Dolores está asociada a la iglesia de San Nicolás de Bari desde mediados del siglo XVIII. La actual hermandad, la que cuenta con la mayor banda de tambores de la Semana Santa avilesina, nació en los pasados años cincuenta, sin embargo, la devoción en Avilés está documentada desde hace siglos. Lo que pasó ayer es que los cofrades celebraron a su patrona.
Tras una misa, que celebró Alfonso López Menéndez, se procedió a un besamanos que sirvió para remarcar la adhesión a una virgen que cuenta en el concejo con un acogimiento histórico. El oficio también sirvió para recordar a los cofrades fallecidos este año.
La fiesta tradicional de los Dolores siempre había sido el Viernes de Dolores, esto es, el anterior a Viernes Santo. Desde la reforma de la celebraciones religiosas, pasó al día posterior a la Exaltación de la Santa Cruz, una fiesta que se celebró en la iglesia de Santo Tomás de Cantorbery a propósito de la reliquia del "Lignum Crucis".
