Juan José Fernández lleva poco más de un año como coordinador de IU en Avilés. Se presentó al cargo con la idea de que su partido acudiera en confluencia con otras fuerzas políticas a las elecciones de 2019. Y, por el momento, ya ha alcanzado un acuerdo con Podemos, pendiente de ser refrendado por las bases.
- Parece que, esta vez sí, va a haber confluencia en Avilés.
-Hemos aprendidos la lección: hace tres años no fue posible y una vez que conocimos el resultado electoral vimos que fue un error porque los avilesinos apostaron mayoritariamente por el cambio. Tenemos un gobierno socialista con 8 concejales y 10.000 votos cuando nosotros conseguimos 4.000 votos y un edil más.
- ¿Qué ha cambiado en estos tres años?
-Hemos sido capaces de entendernos. En el Ayuntamiento aparecemos como un colectivo con un proyecto de ciudad diferente al existente y demostramos que somos un proyecto de cambio sólido. Pese a que tenemos diferencias, porque somos organizaciones distintas, tenemos procesos de diálogo, propuestas conjuntas para trabajar por Avilés de forma coordinada. Hay unas ansias de cambio en la ciudad y somos capaces de entendernos, que no es poco, porque lamentablemente la dinámica en Asturias de Podemos e IU no es ésa. Tampoco en Avilés es lo habitual. Lo normal en Avilés es que haya enfrentamiento político. Somos una excepción y es una de nuestras principales fortalezas a la hora de presentar una candidatura conjunta para gobernar Avilés.
- ¿Por qué en Asturias son incapaces de conseguir esa confluencia? ¿Es problema de personas o de proyecto?
-Creo que influyen muchos las personas y las dinámicas políticas. IU es proclive a la coalición en Avilés, pero desde IU de Avilés no vemos que haya las condiciones idóneas para una coalición en Asturias. No ha habido esa política de diálogo, de colaboración, sino que han sido mayores los desencuentros. Ir juntos sería algo artificial, un matrimonio de conveniencia. No hay feeling entre ambas organizaciones.
- ¿Y eso lo entenderán los votantes, que en Asturias vayan separados y aquí juntos?
-Las dinámicas políticas son diferentes en cada ayuntamiento. En Oviedo hay un gobierno de coalición entre Podemos, IU y PSOE; en Gijón, los mismos grupos son incapaces de presentar una alternativa de progreso, y aquí, tenemos al PSOE más de derechas, más conservador de Asturias, el reducto más fuerte de las propuestas de Susana Díaz. Estamos de acuerdo con los vientos de cambio que soplan a nivel general, pero me da la impresión de que en Avilés nos alegramos más nosotros del triunfo de Pedro Sánchez que la agrupación socialista.
- ¿Sería interesante que Ganemos estuviera dentro de esa candidatura de confluencia?
-Aprendimos de los errores y ahora decidimos partir de una base sólida entre Podemos e IU. ¿Eso significa que está todo hecho? Por supuesto que no. Es una propuesta de confluencia amable, en la que no sobra nadie, y en la que todos aquellos que quieran estar tienen las puertas abiertas. También hablo de Ganemos, a la que nos vamos a dirigir para que se sume a la confluencia y que nos aporte sus puntos de vista.
- ¿Cuándo tienen previsto pasar este acuerdo a las bases? ¿Cree que habrá algún tipo de contestación interna?
-Una vez que la confluencia esté definida, lo someteremos a la ratificación de las bases. En el proceso interno que hubo para la elección de coordinador, éste fue el tema central del debate y la opinión mayoritaria en IU es que hay condiciones para la confluencia. Si la organización fuera hostil al entendimiento, no estaríamos embarcados.
- Dentro de ese debate de confluencias, dos de los puntos más conflictivos serán el nombre y el cabeza de lista, ¿tienen decidido cómo afrontarlo?
-No hay que quemar etapas. Si hay voluntad política de entenderse y voluntad política de confluir, eso no tiene que ser un problema. Es una oportunidad histórica para cambiar Avilés y no podemos permitir que el tren vuelva a pasar por delante por segunda vez.
- Su objetivo es sacar al PSOE del gobierno de Avilés, ¿cómo definiría este mandato?
-El PSOE lleva gobernando Avilés casi 40 años y es un gobierno que languidece, que tiene un proyecto agotado, sin ideas, sin ilusión y muy conservador. No hemos sido capaces de llegar a acuerdos con ellos ni de diseñar un proyecto de ciudad compartido, en el que las fuerzas de la izquierda real nos encontremos cómodos. Cuando se apuesta por las privatizaciones de servicios, por fomentar el beneficio privado por encima de los intereses ciudadanos, evidentemente IU no puede entenderse con el PSOE.
- La Alcaldesa dijo hace unos días que a la oposición la escucha, pero que la tiene en cuenta lo justo...
-En esa entrevista la Alcaldesa se retrata. En las elecciones municipales, lo que realmente recetaron los avilesinos fue entendimiento entre las fuerzas. No se puede gobernar con 8 concejales de 25. Cuando los ciudadanos te castigan en las urnas tienes que plantearte que algo hiciste mal. Pero lo que hizo el PSOE y la Alcaldesa fue más de lo mismo. Demuestra prepotencia, soberbia, vanidad... No se puede tener una actitud de mirar por encima el hombro a los concejales de la oposición y despreciar e ignorar de forma sistemática sus aportaciones y sus propuestas.
- Pero el PSOE está consiguiendo sacar su programa electoral incluso teniendo minoría en el Pleno.
-Eso no es sostenible en el tiempo. Está generando desafección. Cuando una ciudad tiene problemas, está en una situación de crisis, tienes que generar acuerdos mayoritarios que sean capaces de dar la vuelta a la situación, que sean capaces de ilusionar a la ciudadanía, Lo que no puedes hacer es seguir adelante con tus máximas cuando no tienes apoyos políticos. No son capaces de entenderse con nadie, ni a derecha ni a izquierda. En el país se está viendo un realineamiento político: por un lado las fuerzas de las derechas y por otro, las progresistas. Eso en Avilés es imposible porque el PSOE no lo permite. Cada vez que hacemos propuestas dirigidas al presupuesto o a un cambio de proyecto de ciudad, lo rechazan. Es el no por el no y el aquí mando yo.
