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La locomotora "Rojillín" precisa una rehabilitación, advierte un informe

La Alcaldesa sopesa trasladar la máquina de Salinas a la mina de Arnao tras las obras, incluidas en los próximos presupuestos

La locomotora "Rojillín", instalada en Salinas. MARA VILLAMUZA

La locomotora "Rojillín", propiedad del Ayuntamiento de Castrillón, podría rehabilitarse en los próximos meses. La alcaldesa, Yasmina Triguero (IU), señaló ayer que el director cultural del Museo de la Mina de Arnao, Iván Muñiz, ha redactado recientemente un informe técnico sobre las obras que necesita la locomotora.

"El exterior de la locomotora no está en muy buen estado. Es necesario acometer obras. El informe técnico es un avance para intentar meter el proyecto en el presupuesto municipal del próximo año. No obstante si queda dinero de alguna partida intentaremos hace antes la obra", señaló la Alcaldesa. "Una vez rehabilitada estudiaremos la posibilidad de ubicarla en la mina de Arnao. El vagón está en buen estado pero la máquina no", añadió.

La locomotora está ubicada en la calle Juan Sitges en Salinas y durante años se utilizó como oficina municipal de turismo. Fue entonces cuando se reparó el vagón. En Arnao, se instaló hace unos años la locomotora propiedad del Ayuntamiento "Eleonore", que fue rehabilitada y después estuvo unos meses en el Museo del ferrocarril de Gijón.

La "Rojillín" fue donada por Asturiana de Zinc (Azsa) al Ayuntamiento. La máquina de tren fue construida por la empresa alemana Orenstein & Koppel en 1925. La Real Compañía asturiana de Minas (RCAM) la utilizó en sus instalaciones de Reocín (Torrelavega). Adosada a la máquina está el vagón de un metro de ancho de vía que fue construido en 1950.

La locomotora pasó a ser de propiedad municipal en 1982 ya que estaba en el lote de cesión que Azsa realizó al Ayuntamiento para zanjar las deudas que mantenía con el Consistorio. El tren estuvo años en la zona exterior del Ayuntamiento, en Piedras Blancas hasta su traslado a Salinas.

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