"Se están cargando la industria asturiana". El comité de empresa de Alcoa ha reaccionado de forma tajante ante el anuncio de cierre de las plantas de Avilés y Coruña. La plantilla ha manifestado, además, su gran malestar por "las formas" en que se ha comunicado la decisión por parte de la multinicional: "El director de la fábrica nos ha leído un comunicado interno que lleva la firma del presidente de Alcoa, Tim Reyes".

Pese a que llevaban tiempo con la mosca detrás de la oreja, el comité se temía importantes ajustes pero no el cierre definitivo: "El día 31 se inicia el periodo de consultas y sobre la mesa no hay ninguna alternativa al despido colectivo", ha lamentado su presidente, Sergio Sobrido.

Entre el reparto de culpas, incluyen también a los gobiernos estatales. "Quien tiene capacidad para evitar este tipo de situaciones es quien está alimentando la deslocalización de las empresas, los gobiernos centrales, tanto el anterior del PP como el actual del PSOE, con políticas encaminadas al cierre de la industria electrointensiva", señaló Sergio Sobrido, del sindicato USO.

Las supuestas pérdidas que alega Alcoa no son motivo, aseguran los trabajadores. "La situación es muy complicada, tenemos una compañía que se comporta como un grupo inversor. Hay pérdidas en aluminio, pero como grupo están ganando dinero a patadas. Los diferentes gobiernos no han hecho nada para que los costes eléctricos sean asumibles. Se están cargando toda la industria asturiana y lo están haciendo conscientemente", sentenció el portavoz de CC OO en el comité, José Manuel Gómez de la Uz.

Y en sus críticas no se olvidan del plan contra las centrales térmicas del actual gobierno socialista. "Este no es un problema solo de Avilés o de Asturias, sino estatal, del Gobierno de España. Debe buscar una solución para que no desaparezca la industria del aluminio en España. O se busca un comprador o se nacionaliza la empresa. A no ser que el Gobierno (de Pedro Sánchez) tenga un acuerdo con la compañía de tal manera que permita a la empresa irse libremente a cambio de que la Ministra tenga un argumento fácil para ese cierre de las térmicas que tanto quiere", criticó Daniel Cuartas, de la UGT.

José Antonio Jaquete, delegado sindical de A. P. C., añadió: "Si se cumple con el cese de actividad va a ser muy duro no solo para todas las familias afectadas por los despidos, sino para toda la comarca de Avilés".