Los avilesinos se acostaron ayer con un fuerte olor similar al del alquitrán y han amanecido esta mañana con un "aroma pestilente" que afecta sobremanera al centro de la ciudad. La Policía Local se desplazó hasta la ría pero no ha encontrado indicios de contaminación que expliquen el olor a putrefacto. El fuerte olor es el tema de conversación en entradas de colegios y cafeterías de la ciudad: "No hay quien respire".