El choque frontal de dos coches en la mañana de ayer provocó dos heridos y el cierre al tráfico la carretera Luanco-Avilés durante más de dos horas. Los vehículos implicados, con matrículas 0582 KHB y 2637 DSV, quedaron bastante afectados por la fuerte colisión, según las autoridades que acudieron al lugar a socorrer a los heridos. El accidente se produjo a las diez menos diez de la mañana en el punto kilométrico 10 de la AS-238, en la curva conocida como de Llantada, próxima aconocido restaurante La Pradera-Campanal.

José Viña, antiguo gerente del negocio hostelero y residente en la zona, fue testigo presencial del choque. "Oímos un zambobazo muy fuerte y salimos de casa sin saber lo que había pasado", describió. Y añadió que a la zona acudieron patrullas de la Guardia Civil y Policía Local, así como dos dotaciones de bomberos y una ambulancia.

La primera hipótesis de los bomberos que actuaron en el lugar del siniestro, según relató este testigo presencial, se basa en que R. A. F., de 86 años, perdió el control de su turismo y se empotró contra el vehículo de S. M. N., mujer de 36 años. Viña añadió que el octogenario tuvo que ser excarcelado de su coche. Los dos conductores fueron trasladados posteriormente en una ambulancia de soporte vital básico al centro hospitalario avilesino San Agustín con pronóstico reservado, aunque a priori no se teme por sus vidas.

Las autoridades cerraron al tráfico la AS-238 durante "cerca de dos horas y media", según concretó Viña, debido a la cantidad de trozos de chapa que había depositada sobre el firme que hacían imposible el tránsito rodado.

El incidente es uno de los muchos ocurridos en este vial que une la capital de Gozón con la villa vecina. Y es que la AS-238 cuenta con varias zonas consideradas puntos negros por haber sido lugares donde se suceden los accidentes. En concreto, el punto kilométrico 10 se considera especialmente problemático por los propios vecinos al tratarse de una zona donde los vehículos procedentes de Luanco se encuentran con un cambio de rasante y una curva cerrada a la derecha después de varios kilómetros circulando por una línea recta.

Afortunadamente, en esta ocasión no se tuvieron que lamentar pérdidas humanas, pero a muchos gozoniegos cada accidente en esta vía hace rememorar otros episodios trágicos vividos en la principal ruta de comunicación entre Luanco y Avilés.