Chupetines, prebenjamines, alevines, cadetes, juveniles, junior, promesas, senior... Y así más de trescientas personas se dieron cita ayer por la mañana en el Enrique Alonso con el fin de dar zancadas solidarias. El dinero recaudado en esta prueba deportiva organizada por la Asociación de Padres y Madres (AMPA) del centro se ha destinado en esta ocasión a dos asociaciones de ámbito regional que trabajan con niños y familias afectadas por el trastorno del espectro del autismo, como son Adansi y Asperger Asturias. "Es reconocido su trabajo para favorecer el desarrollo personal y la inclusión de las personas que padecen esta dolencia", destacaron los organizadores.
La carrera comenzó a las once de la mañana con los corredores más jóvenes. Todos llevaban dorsales decorados para la ocasión por los alumnos del centro educativo, desde Infantil a Primaria. Cada dorsal se entregaba a cambio de un donativo de cuatro euros. La gran afluencia de público se hizo notar en las inmediaciones del Enrique Alonso desde bien temprano. Según se acercaba la hora de salida, el bullicio deportivo fue a más: familias al completo, grupos de amigos, colectivos como las "Yes We Run" y hasta perros con dorsal se dieron cita en el patio del colegio, donde estaba instalada la meta.
Aplausos
Una vez que los más pequeños cumplieron entre aplausos su carrera de ochenta metros, se fueron sucediendo las pruebas hasta la final, que terminó con los mayores de 16 años que cumplieron un recorrido de cuatro kilómetros por el propio colegio y el vecino parque de La Magdalena. Los tres primeros clasificados de cada categoría recibieron medallas y también se sortearon algunos regalos entre los que adquirieron dorsal. Aunque ayer lo importante no era ganar sino participar a favor de quienes más lo necesitan.
La fiesta concluyó como empezó: con ambiente festivo, música y caldos calientes.
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