"Los políticos tienen que pasar de una vez a ser hombres de Estado". Esto es algo que defiende el periodista José Luis Poyal desde hace tiempo. Y ayer mismo lo volvió a recalcar en la presentación oficial de "40.º aniversario de la constitución", su tercera recopilación de artículos: desde 1977 hasta el momento presente.

Hace cuatro décadas, Poyal empezó a escribir sobre la Constitución y continúa haciéndolo en la actualidad. "El domingo mismo, en las páginas de LA NUEVA ESPAÑA, donde lleva escribiendo desde hace diez años", señaló Francisco López Jiménez, redactor de este periódico, que ayer se encargó de concelebrar el bautizo de la última colección de artículos de un veterano articulista de LA NUEVA ESPAÑA, exeditorialista en "La Voz de Avilés" y director durante años de la extinta revista "Ensidesa".

El tercer libro anclado en la labor periodística de Poyal lo edita la Sociedad de Amigos del País de Avilés y Comarca. Antonio Sabino, el presidente del colectivo, recordó que lo que hacen es "debatir y analizar temas de interés para la ciudadanía", señaló. "No puede ser de mayor actualidad el cuadragésimo aniversario de la Constitución", recalcó Sabino. "Nos encontramos. Estuvimos hablando, le dije que estaba recogiendo los artículos sobre la Carta Magna. Me dijo que le interesaba y le respondí que no podía estar más honrado", comentó el también autor de "Apuntes políticos. Transición y democracia" y "Apuntes políticos. Emergencia y política social".

Jiménez calificó a Poyal de "referente a tener en cuenta" y el aludido se quitó importancia: "No hay cosa más antigua que los artículos de opinión: forman un género volandero". El autor reconoció cierta "evolución o contradicción" en sus apreciaciones sobre la Constitución. "Al principio había una cierta prevención ante lo que está por venir", añadió. Sobre las posibles reformas de la Carta Magna declaró Poyal no ser "partidario de entrar en canal en ella". Entiende el autor que "más vale intentar hacer reformas prudentes y concretas". No ahondó entre las que están sobre la mesa, pero sí dio la receta para materializarlos: "Por medio del consenso".

Poyal, que se declaró independiente, con una pizca liberal y otra de socialdemocracia, concluyó su intervención recordando que España es un "país que está mejorando, que vive el período de mayor estabilidad" y, pese a ello, "tenemos esos genes que nos hace pelearnos entre nosotros". El periodista, sin embargo, no renuncia al optimismo: "Somos un gran país, somos una gente estupenda, es una maravilla ser español". Para probar su sensación enumeró: la sanidad pública "mejor del mundo", obras públicas "determinantes". Y todo esto, cuarenta años después.