La compañía corverana Hiasa, del grupo Gonvarri, reutilizará en su proceso metalúrgico un producto secundario del complejo industrial de Du Pont tras un acuerdo innovador entre ambas compañías y una inversión que supera el millón de euros. El acuerdo ejemplifica el concepto de "economía circular", el aprovechamiento de los recursos en el que prima la reutilización y reciclaje de residuos, y conllevará para ambas compañías una reducción de los consumos de energía, agua y transporte.

La alianza permitirá que el grupo Gonvarri (con plantas en Asturias, Burgos y Tarragona) reutilice en su proceso productivo el ácido clorhídrico que para Du Pont es un producto secundario. Gonvarri lo usará para los procesos que lleva a cabo en sus instalaciones de Cancienes (la planta de Hiasa, situada a tres kilómetros de distancia del complejo químico de Tamón) y también en las de Burgos y Tarragona.

"En Du Pont buscamos siempre maneras diferentes de abordar la mejora de nuestros procesos. En este caso ha sido clave encontrar un socio para el que un flujo de ácido clorhídrico de concentración media, por debajo de la concentración comercial, supusiera un valor añadido. La colaboración con Gonvarri nos permite evitar la neutralización de este producto secundario con sosa, proceso que comporta un gasto económico además de aumentar nuestro consumo de recursos y necesidades de transporte de forma considerable," explica la asturiana Ángela Santianes, presidenta de Du Pont en España.

Jon Riberas, presidenta de Gonvarri, añade: "Gonvarri está avanzando hacia la circularidad de sus procesos productivos. Éramos conscientes de la posibilidad de producir sinergias, pero la complejidad de las pruebas de compatibilidad junto con los ajustes en los procesos, han requerido un importante esfuerzo en la consecución de un acuerdo en el que finalmente todos nos beneficiamos. Du Pont evita comprar, transportar y manejar sosa, Gonvarri adquiere el ácido a coste reducido para sus líneas de decapado y todo ello redunda en un menor consumo de cloro".

Este acuerdo, basado en principios clave de la economía circular, ha requerido una inversión inicial de más de un millón de euros asumida principalmente por Du Pont. Los beneficios que reporta tanto para ambas compañías como para la reducción de la huella medioambiental son significativos. La producción de cloro requiere de un gran aporte energético y de agua, por lo que se estima que esta iniciativa reducirá el equivalente al consumo de agua de un pueblo de 350 habitantes durante un año, el consumo eléctrico de un mes de Du Pont en Asturias (equivalente a la energía consumida por 1.500 viviendas en un año) y un total de 500.000 kilómetros al en transporte por carretera.